Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Entérate de lo más reciente en el mundo del entretenimiento al activar las notificaciones.
Tal vez más tarde
Quiero recibirlas

Publicidad

Lorna Cepeda confesó el doloroso suceso que vivió en 2016 por el que ya no puede tomar el sol

En vestido de baño y bajo una carpa, la actriz confesó el porqué no le importa que le digan “blancox”.

Lorna Cepeda
Lorna Cepeda
/Foto Instagram

Lorna Cepeda encantó a sus seguidores con una foto en traje de baño por la que recibió decenas de halagos. Sin embargo, la actriz usó la imagen para contar a sus seguidores algo muy privado que pocos sabían de ella.

 

Lo hizo también porque ha recibido comentarios en sus fotos en la que le dicen que está muy blanca y que debería broncearse un poco. Resulta que Lorna, según su post, no puede exponerse al sol por cuestiones de salud.

 

Publicidad

“Tengo absolutamente prohibido volver a tomar sol en mi vida, me hace mucha falta, obviamente, amoooo el sol, tirarme en la playa o en la piscina, agarrar un poco de color, pero tuve un suceso en el 2016, doloroso, muy asustador, médicos, cirugías, y mini cirugías y que por un milagro de Dios, todavía estoy en este mundo”, escribió.

 

Publicidad

 

Te puede interesar: ¡De un bebé arcoíris! Carolina Cruz está embarazada y ya tiene tres meses de gestación

 

Publicidad

Contó que en esa época debía visitar a su dermatólogo con mucha frecuencia para que le revisara con lupa el cuerpo en búsqueda de lunares peligrosos.  Si le llegaba a encontrar debía someterse a una minicirugía para removerlo. Todavía hoy debe hacer esas consultas dermatológicas, pero ya no tan seguido.

 

Publicidad

Sin embargo, la actriz debe cuidarse mucho para evitar la salida de esos lunares producidos en ella por la exposición al sol.

 

Confesó que tiene por ahí unas 25 cicatrices, sobre todo en la espalda, pero que las ama con todo su corazón porque le recuerdan lo bendecida que es por la oportunidad que tiene de vivir y seguir disfrutando con los suyos.

 

Publicidad

Cuando me siento cansada, agotada, me devuelvo a ese diciembre del 2016 y doy las gracias de poder estar aquí́! A pesar de la adversidad y demás! ¿Qué nos queda? La Fe, es mi consejo, vive esta vida con la Fe, sigue este camino con ella, sin eso, sería todo más difícil!”, finalizó el relato.

 

Publicidad

 

  • Publicidad