Se conocen nuevos detalles sobre el caso de Julián Cantillo, un joven estudiante de la Universidad del Atlántico en Barranquilla quien perdió la vida de manera trágica al caer desde el sexto piso de uno de los bloques de la institución. Este incidente dejó en estado de shock tanto a la comunidad educativa como a toda la ciudad, que sigue intentando comprender las circunstancias que llevaron a su fallecimiento.
El fatídico suceso ocurrió el pasado jueves 22 de agosto, alrededor de las 11 de la mañana, pese a los esfuerzos por salvarlo, el joven fue trasladado de urgencia a la Clínica Portoazul, donde lamentablemente no pudo sobrevivir.
La noticia de la muerte de Julián generó una profunda consternación entre sus compañeros, profesores y familiares, quienes aún no encuentran explicación clara a lo sucedido. Aunque las causas del incidente no han sido esclarecidas por completo, la universidad activó los protocolos de seguridad y ofreció apoyo psicológico a aquellos que presenciaron el desafortunado hecho.
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El triste mensaje de Julián Cantillo
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Poco antes de su muerte, Julián envió un inquietante mensaje a sus compañeros de clase a través de un grupo de WhatsApp, en el que dejaba entrever su estado emocional y la decisión que había tomado. En su mensaje, pidió disculpas por cualquier inconveniente que pudiera causar, sugiriendo que posiblemente se cancelaran las clases, y solicitó que se contactara a sus familiares.
El contenido del mensaje, que incluía instrucciones precisas para que sus últimas voluntades fueran cumplidas, dejó una sensación de impotencia y tristeza entre quienes lo leyeron. Julián incluso compartió el número de teléfono de su padre, anticipando la necesidad de que se le informara sobre lo que había ocurrido.
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La última imagen del estudiante Julián Cantillo
En un gesto final que sorprendió aún más a quienes lo conocían, Julián habría publicado una foto suya como estado de WhatsApp poco antes de caer, según versión de medios locales, que posteriormente compartieron el pantallazo.
En la imagen, acompañada de un texto cargado de dolor, el joven expresaba que nunca se había sentido lo suficientemente seguro como para compartir una foto de sí mismo. En su mensaje, confesaba que había hecho un esfuerzo por vestirse y arreglarse “lo mejor posible” para que, cuando encontraran su cuerpo, al menos luciera decente.
“Nunca tuve la confianza de subir una foto mía. De hecho, nunca tuve la confianza para siquiera tomarme una foto. Hoy traté de vestirme y arreglarme lo mejor posible para que por lo menos mi cuerpo se vea decente”, escribió Julián en lo que sería su último mensaje, dejando a quienes lo conocieron con el corazón roto y muchas preguntas sin respuesta.
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