La interrupción voluntaria del embarazo sigue siendo un tema controversial. En Estados Unidos, exactamente en el estado de Ohio, una niña de diez años la cual se encuentra embarazada de seis semanas como fruto de un abuso sexual, ha tenido que ser trasladada fuera de dicho estado porque a finales del mes de junio ahí se determinó que abortar está rotundamente prohibido a a nivel estatal, luego de que el Tribunal Supremo estadounidense tomara la decisión de suprimir el derecho al aborto a nivel federal.
Por lo tanto, la menor ha tenido que salir de su lugar de residencia hacia el estado de Indiana, para ver si en ese lugar le aprueban la petición de que se le realice el procedimiento, ya que en el estado en el que vive, la respuesta fue negativa.
La noticia de que se encontraba en estado de embarazo, se la dio a conocer su ginecóloga el pasado lunes, cuando le especificaron que tenía seis semanas y tres días, Así lo informó el sábado pasado, el medio de comunicación 'Indianapolis Star Tribune'.
De acuerdo a la ley estatal, los abortos están prohibidos a partir de la sexta semana, cuando se prevé que el feto empieza a tener latido. La norma ha sido recurrida, pero el Tribunal Supremo de Ohio dictaminó su vigencia hasta que se resuelvan los recursos, ha informado 'The Cincinnati Enquirer'.
Vale la pena resaltar que Indiana también está tramitando una ley estatal del aborto y hay prevista ya una sesión del congreso estatal para el 25 de julio en la que la mayoría republicana previsiblemente impondrá nuevas restricciones.
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En los últimos meses en Indiana se ha detectado un incremento de los pacientes procedentes de otros estados que solicitan la realización de abortos puesto que en sus lugares de origen ya está prohibido
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