Cristian Montenegro defiende a su esposa de trapo, ¿servirá de año viejo?

En 2023, el nombre de 'Cristian Montenegro', un joven de 28 años de Bogotá, se convirtió en el centro de atención en las redes sociales y los medios de comunicación. Su historia, fuera de lo común, comenzó a resonar cuando presentó a su familia de trapo: una "esposa" y un "hijo" fabricados por él mismo.Esta particular situación surgió tras una profunda decepción amorosa con una mujer a la que llamaba Karen, quien le fue infiel. Según Montenegro, fue su muñeca, a quien llama Natalia, la que le ayudó a superar la soledad, convirtiéndose en una presencia central en su vida.Recientemente, Montenegro reapareció en redes sociales luego de meses de ausencia. Durante este tiempo, se había alejado para evitar las críticas y comentarios hirientes de los internautas. Sin embargo, su reaparición vino acompañada de una corta entrevista que volvió a encender el debate sobre su vida y decisiones.En un video que rápidamente se volvió viral, se ve a Montenegro en un parque junto a su "hijo" de trapo. Durante la grabación, él interactúa con su muñeco mientras un creador de contenido, conocido como ‘Iguana TV’, lo acompaña. En medio de la conversación, el entrevistador le lanzó una pregunta inesperada: si estaría dispuesto a vender a su muñeca para quemarla en la celebración de fin de año, una práctica común en Colombia donde se queman figuras de muñecos como símbolo de despedir el año viejo.La respuesta de Cristian fue clara y emotiva: "Yo a ella la tengo muy presente, me da pesar destruirla, es lo que más amo". Esta afirmación reafirmó su profundo apego emocional hacia Natalia, a quien describe no solo como su pareja, sino como el apoyo que le ha brindado compañía y afecto.La historia de Montenegro ha generado opiniones divididas. Algunos de sus seguidores muestran preocupación por su bienestar emocional y sugieren que podría necesitar atención especializada en salud mental. Incluso su expareja, en entrevistas anteriores, mencionó que Cristian tenía "fantasías poco comunes", lo que habría dificultado que desarrollara relaciones saludables. A pesar de estos comentarios, él insiste en que ha encontrado una forma de ser feliz, e incluso ha manifestado que su familia de trapo es parte de su camino para entretener a otros, planeando realizar espectáculos con ellos como una fuente de ingresos.Más allá de la entrevista, el joven se ha mantenido activo en redes, compartiendo imágenes recientes con su "esposa", quien ahora luce un aspecto diferente. La muñeca, con una apariencia más estilizada y detallada, generó una nueva ola de comentarios en línea.Muchos internautas reaccionaron con humor, insinuando que Cristian había "invertido" en su compañera y mencionando, en tono jocoso, que parecía haberle hecho una cirugía estética para mejorar su aspecto.Su caso plantea preguntas sobre la salud mental, la aceptación de formas inusuales de lidiar con la soledad y la manera en que la sociedad reacciona ante comportamientos que rompen con lo convencional. Para Montenegro, sin embargo, la respuesta es simple: ha encontrado la felicidad a su manera, y eso es lo que más valora.Mira también: Temido pueblo habitado por muñecos de trapo