Una persona obsesa no debería bajar de peso motivado únicamente por su apariencia física, sino por el bien de su salud.
Para muchos puede ser frustrante, pues lograr el objetivo requiere de mucho esfuerzo y paciencia. Sin embargo, hay quienes llegan a la meta victoriosos y se convierten en ejemplo para los demás.
Es el caso de Rebecca Grafton, quien luego de graduarse de la universidad empezó a ganar peso incontroladamente. Hasta sintió que su rostro estaba irreconocible en un momento.
Te puede interesar: La RUTINA de ejercicios con la que Greeicy Rendón se conserva así de MAMACITA
Al notar el cambio extremo de su cuerpo, decidió planificar unas vacaciones a Jamaica con fecha límite y desde el 12 de enero de 2014. Su idea era que cuando fuera a ver las fotos de tal viaje, pudiera reconocerse.
Con esta motivación, la joven de 119 kilos adopto tres sencillos hábitos con los que, gradualmente, fue perdiendo peso hasta tener 45 kilos menos. Su salud mejoró y su cuerpo cambió.
Rebecca documentó su proceso en redes sociales. Fue tan atractiva su historia que terminó convirtiéndose en bloguera de estilo de vida.
Los tres hábitos para bajar de peso:
Mantener conteo de las calorías:
Con ayuda de la aplicación My Fitness Pal, Rebecca fijó el objetivo de calorías al día. “Yo seguía esos objetivos y también agregaba las calorías que quemaba del ejercicio. Eso funcionó para mí hasta que perdí 43 kilos”, expresó.
Alimentación balanceada:
Manejó sus comidas con la regla de 80 – 20, es decir comía más veces de forma saludable (el 80) y una o dos veces a la semana comía algún alimento que disfrutara, pero sin abusar (el 20).
Ejercicio:
La joven dedica una hora diaria al ejercicio físico, sin necesidad de ‘matarse’. Lo importante fue la constancia con la que lo hizo que le permitió bajar de peso en combinación con los dos hábitos anteriormente mencionados.
De esta manera, la joven cambió su vida y ahora procura mantenerse en forma.
