
En el suroriente de Bogotá, en la localidad de Rafael Uribe Uribe, se asienta un barrio cuyo nombre evoca la memoria de una de las figuras más emblemáticas y recordadas del periodismo y la política colombiana: Diana Turbay Quintero.
En momentos de coyuntura nacional por el atentado que el precandidato presidencial Miguel Uribe Turbay sufrió el pasado sábado 7 de junio, se revive en la memoria colectiva el legado de su propia madre, la reconocida periodista Diana Turbay, cuya vida fue truncada por la violencia que azotó al país en los años 90.
Diana Turbay, hija del expresidente Julio César Turbay Ayala, fue una abogada y periodista que dedicó su vida a informar y buscar la verdad.
Su carrera estuvo marcada por su compromiso con el periodismo, dirigiendo importantes medios como la Revista Hoy por Hoy y el Noticiero Criptón.
Sin embargo, su historia tomó un giro dramático cuando fue secuestrada en 1990 por "Los Extraditables", un grupo vinculado al narcotráfico liderado por Pablo Escobar.
Su cautiverio, un episodio que conmovió a Colombia y al mundo, terminó el 25 de enero de 1991 durante un intento de rescate, un suceso doloroso que el Nobel Gabriel García Márquez inmortalizó en su obra "Noticia de un Secuestro".

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Miguel Uribe Turbay, actual senador de la República y precandidato presidencial quien aún se encuentra en la Unidad de Cuidados Intensivosde la clínica Santa Fe, es hijo de Diana Turbay, lo que vincula directamente a su familia con este legado de memoria y dolor.
¿Dónde queda el barrio Diana Turbay?
El Diana Turbay está ubicado en la localidad de Rafael Uribe Uribe a tan solo unos 15 minutos, en vehículo, desde la cárcel La Picota, punto de referencia en el sur de Bogotá.
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Este sector no es solo un conjunto de calles y viviendas; es un símbolo de la resiliencia de una comunidad que se levantó en una zona de la ciudad que históricamente ha enfrentado desafíos sociales y de infraestructura.
La decisión de nombrar este sector en honor a Diana Turbay fue un acto de reconocimiento a su valentía, a su lucha por la libertad de expresión y a su sacrificio en un contexto de profunda violencia en el país.
Aunque la muerte de Diana Turbay ocurrió en 1991 y en ese momento el barrio ya existía se desconoce si tenía otro nombre anteriormente o lo llamaron así desde que ella luchaba por los menos favorecidos y fue un homenaje aún en vida.
Sin embargo, la conexión es innegable y se ha mantenido a lo largo de los años como un homenaje póstumo a su figura.
La existencia de este barrio subraya la importancia de la memoria histórica en Colombia. Es un recordatorio palpable de las consecuencias del conflicto armado y de las vidas que fueron sacrificadas en su nombre.
A lo largo de los años, el barrio ha crecido y se ha desarrollado, aunque, como muchas comunidades en la periferia de Bogotá, sigue enfrentando retos en materia de servicios públicos y oportunidades.
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