Boxeador Luis Quiñones, entre la vida y la muerte tras ser noqueado en Barranquilla

El joven boxeador santandereano Luis Quiñones se debate entre la vida y la muerte luego de que el fin de semana recibiera un fuertes golpes en la cabeza que lo dejaron inconsciente en medio de un combate.Quiñones se encontraba el sábado en Barranquilla donde se enfrentó a una pelea de boxeo por el título nacional de las 140 libras, frente a su rival José Muñoz.En medio del combate el boxeador Muñoz tomó ventaja sobre Quiñones luego de que el árbitro detuviera la pelea en la que el santandereano Luis Quiñones ya trastabillaba y se veía algo desubicado mientras se agarraba de las cuerdas; sin embargo, el enfrentamiento se reanudó y José Muñoz no dudó en seguir disputando el título.Muñoz le lanzó tres ganchos y dos 'jabs' a su rival, todos a la cabeza; inmediatamente Quiñones se desplomó en el ring. Tras un conteo de 10 se decretó el nocaut fulminante. Pero el perder el título no fue la tragedia de Quiñones, pues el boxeador santandereano comenzó a presentar síntomas de afectación neurológica por lo que en horas de la noche fue trasladado de urgencia a la clínica Clínica General del Norte a donde llegó inconsciente y tuvo que ser operado de urgencia el domingo para sacarle un coágulo de sangre.Y tras pasar 24 horas de la cirugía la clínica emitió un primer comunicado oficial en el que reveló un parte de salud del deportista de 25 años de quien se confirmó que está en coma inducido.De acuerdo al primer comunicado emitido por la Clínica General del Norte, el pronóstico del boxeador es “muy reservado para la vida y la función con alta morbimortalidad, lo cual se ha informado ampliamente a sus familiares”.En el comunicado se detalló que el santandereano ingresó con deterioro neurológico producto de "trauma craneoencefálico por contusiones traumáticas craneales secundario a su actividad profesional de boxeo”.En medio de las maniobras por salvarlo los médicos tuvieron que practicar “intubación orotraqueal y ventilación mecánica invasiva para protección de la vía aérea y neurológica”.Ahora el deportista se encuentra en un momento crucial en el que está bajo observación durante 48 horas.