Niña es considerada la reencarnación de una diosa al nacer con seis dedos

En el tranquilo rincón de Bharatpur, en el estado de Rajastán, India, ha nacido una niña que desafía las normas de la genética humana y ha cautivado a su comunidad. Esta recién nacida llegó al mundo con siete dedos en cada mano y seis en cada pie, sumando un total de 26 dedos. Lo que podría considerarse una rareza médica se ha convertido en una fuente de orgullo y espiritualidad para su familia, quienes ven en esta singularidad la "reencarnación de una diosa".Los médicos, tras evaluar el caso de la bebé, confirmaron que padece una rara anomalía genética conocida como polidactilia, que se caracteriza por la presencia de más dedos de lo habitual. Sin embargo, destacan que la niña no presenta problemas de salud derivados de su condición. El Dr. BS Soni, médico del hospital donde nació la bebé, afirmó: "No hay nada malo en tener 26 dedos; se trata de una anomalía genética. Por lo demás, la niña está absolutamente sana".Pero para la familia de la niña, esta condición va más allá de la ciencia y la medicina. En las cercanías de su lugar de nacimiento se encuentra el templo de Dholagarh Devi, una deidad hindú representada con múltiples brazos. La familia sostiene firmemente que la niña es la encarnación viva de esta diosa y que su llegada al mundo es un regalo divino. Esta creencia ha despertado la curiosidad y el asombro de la comunidad local.La madre de la bebé, Sarju Devi, de 25 años, está encantada con el acontecimiento. Su hermano, tío de la menor, compartió emocionado con los medios locales: "Mi hermana ha dado a luz a una bebé que tiene 26 dedos, y creemos que es la encarnación de Dholagarh Devi. Estamos muy contentos".Este caso extraordinario ha generado un gran interés tanto a nivel local como internacional, destacando la profunda espiritualidad y la capacidad de las creencias culturales para influir en la percepción de las diferencias genéticas. La niña, con su singularidad, se ha convertido en un símbolo de la conexión entre lo divino y lo terrenal en la comunidad de Bharatpur.Te puede interesar: ReTóxicos capítulo ocho: ping pong sorpresa