En La Kalle te damos cuatro razones que harán que ames cada segundo de tu soltería. Si no quieres ‘vestir santos’ de por vida, tampoco te metas con el primer aparecido… puede resultar peor.
Sin duda esta etapa de soledad, recuerdos y nostalgia harán de ti una mejor mujer para el indicado.
Tomar riesgos: No hay nada que te ate, lo que hubiese sido una decisión difícil y se transforma en autonomía y libertad absoluta. Cambiar de domicilio, trabajar en otra ciudad, vestirte a tu gusto y hasta depilarte cuando desees.
Viajar: En pareja, con amigos o en familia, viajar siempre será una cura para el alma. Sin embargo, conocer sola un nuevo lugar, hará latir tu corazón como nunca antes.
Yo con yo: Conocerte, retomar actividades que te apasionan y redistribuir el tiempo. De tal manera que logres refugiarte en lo más profundo de tus sueños y deseos.
Volver a empezar: Cuando sientas el impulso, querrás amar de nuevo y serás una persona diferente: Más fuerte, arriesgada y que sabe lo que quiere. Sin ser un témpano de hielo te atreverás a conocer a otras personas y definir de entrada si quieres una aventura, una amistad o algo serio.
Con información de: Elementos.com
