
Cinco meses después de la trágica masacre que cobró la vida de una familia pastoral en Aguachica, Cesar, un nuevo video captado por cámaras de seguridad arroja luz sobre lo ocurrido aquella tarde del 29 de diciembre de 2024.
En las imágenes se observa cómo Zaida Andrea Sánchez Polanco, conocida como alias La Diabla, reaccionó mientras sicarios abríanfuego contra la familia que almorzaba en un restaurante.
Aquel día, el pastor Marlon Yamith Lora, su esposa Yurlay Rincón y sus dos hijos, Ángela Natalia y Santiago, compartían un almuerzo familiar. Sin saberlo, estaban sentados en la mesa contigua a La Diabla, mujerseñalada de haber sido pareja de alias El Calvo,un presunto narcotraficante asesinado días antes.
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La confusión mortal se originó cuando un sicario llegó en moto y abrió fuego creyendo que su blanco estaba frente a él. Ángela Natalia vestía de manera similar a la esposa de El Calvo, lo que habría causado el error fatal.
El ataque dejó sin vida de inmediato al pastor, su esposa y su hija. Santiago, el hijo menor, fue trasladado al hospital pero falleció dos días después debido a la gravedad de las heridas.
El video, revelado por el programa Los Informantes de Caracol Televisión, en el minuto 4:30, muestra el momento en que Sánchez Polanco, con una cartera en la mano, se levanta abruptamente y huye del lugar mientrasse escuchan los disparos y los gritos de las personas presentes.
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Su reacción rápida la alejó del restaurante, salvándole la vida. Sin embargo, semanas después, ella también fue ultimada a las afueras de un hotel en Medellín,donde se alojaba con su hijo de nueve años.
Las autoridades han analizado exhaustivamente más de 71 horas de grabaciones de 86 cámaras de seguridad para esclarecer este caso. Las pesquisas concluyeron que la familia pastoral no tenía relación alguna con el conflicto, sino que fue víctima de una lamentable confusión.

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Durante las investigaciones también se logró la captura de varios implicados que habrían participado en la planeación del atentado dirigido a La Diabla.
Ángela Barrera, madre del pastor Lora, compartió conmovida que ese día ella iba a reunirse con sus seres queridos en el restaurante, pero un malestar físico la hizo desistir. "Algo me detuvo. No fui y mira lo que pasó", expresó, recordando con dolor que un presentimiento le salvó la vida.
El caso sigue generando conmoción por la crueldad del ataque y el destino trágico de una familia inocente que perdió la vida en medio de una disputa que no les pertenecía.
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