Margarita Celina Herlein, era una mujer proveniente de un pueblo alemán, que cuando contrajo matrimonio se apropió muy bien de la frase 'hasta que la muerte nos separe', pues se dice que entre 1962 y 1977 mató a sus dos esposos y a uno de sus amantes.
La mujer que le resultaba muy llamativa a los hombres por su hermosa cabellera rubia, sus ojos azules y delicadas facciones que hacían una perfecta armonía en su rostro, se casó por primera vez a los 17 años con un hombre bastante mayor que ella, con el que tuvo dos hijos.
Cansada de su esposo, la mujer se buscó un amante y como en dicha época divorciarse no era una opción muy viable y asequible para las mujeres, Margarita empezó a buscar la manera de deshacerse de su esposo, y eligió como la mejor opción el uso de raticida, el cual fue ingerido por el hombre.
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No obstante, su versión de los hechos y los registros médicos señalaron que se trataba de un cáncer fulminante. Sin embargo dicha versión empezó a caer en duda cuando se supo que tiempo después su amante había muerto por una serie de síntomas algo raros y complicados.
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Con el fin de empezar una nueva vida, la mujer se fue a vivir junto a sus dos hijos a una ciudad de Argentina donde conoció al que se convertiría en su segundo esposo y tercera víctima. Se trataba de Abel Vitale, un carpintero que le alquiló en un principio su casa, pero que al no poder resistirse a sus encantos la invitó a vivir para siempre con él proponiéndole matrimonio.
Como fruto de dicha unión nació una niña que perdió a su padre cuando tenía tan sólo dos años, por un supuesto diagnostico que señalaba que el hombre padecía de cáncer en su médula espinal. Dicha versión no convenció en ese entonces a su familia.
Un caso muy parecido sucedió más adelante con un violinista con el que la mujer tuvo un amorío. Sin embargo fue sólo hasta su tercer esposo y cuarta victima que todo se destapó, pues a diferencia de los demás, la familia de el hombre no se resigno y puso en investigación todo lo sucedido.
Fue así entonces como la policía empezó a sospechar, y después de realizarle una autopsia al cuerpo del hombre se supo que había sido asesinado con veneno para ratas. Por dicha razón los cuerpos de los otros hombres también fueron estudiados y se reveló que todos contenían la misma sustancia.
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El 3 de mayo de 1979, la Justicia condenó a Margarita Celina Herlein a cadena perpetua, sentencia confirmada por la Cámara de Apelación Penal dos meses después. Desde entonces la mujer fue llamada por todos como 'La probadora de hombres.
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