En Colombia, la Constitución garantiza el derecho al libre desarrollo de la personalidad, lo que incluye el consumo de sustancias psicoactivas como la marihuana en ciertos casos. Sin embargo, eso no significa que puedas presentarte al trabajo bajo sus efectos sin consecuencias.
El consumo de marihuana, o cualquier otra sustancia, está permitido en el ámbito privado, pero cuando interfiere en el desempeño laboral o representa un riesgo para ti o tus compañeros, las reglas cambian.
La ley no prohíbe de forma general estar bajo la influencia de estas sustancias en el trabajo, pero sí permite al empleador tomar medidas si demuestra que el consumo afecta tu desempeño o pone en peligro el entorno.
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¿Cuándo puede el empleador despedirte?
El empleador tiene el derecho de proteger la seguridad y bienestar en el espacio laboral, y si el consumo de marihuana pone en riesgo la integridad del trabajador, sus compañeros o cualquier otra persona, entonces puede intervenir. Eso sí, no es un proceso arbitrario. Para despedir a alguien bajo estas circunstancias, el empleador debe seguir una serie de pasos que aseguren que se respete el debido proceso.
Primero, el consumo debe estar afectando directamente tu capacidad para desempeñarte en tu cargo. Esto puede incluir desde disminución de habilidades, errores graves en la ejecución de tareas o un aumento en el riesgo de accidentes, sobre todo si trabajas en un entorno peligroso, como en la construcción o el manejo de maquinaria pesada.
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Además, es fundamental que tu empresa cuente con políticas claras respecto al consumo de sustancias psicoactivas, incluidas en el reglamento interno de trabajo. Este documento debe detallar bajo qué condiciones el consumo es inaceptable y las consecuencias que puede acarrear.
¿Qué dice la Corte Constitucional?
La Corte ha dejado claro que no se puede aplicar una prohibición general para el consumo de marihuana en el trabajo. Sin embargo, también ha señalado que si el consumo afecta negativamente tu desempeño o pone en riesgo la seguridad, el empleador está en su derecho de tomar medidas, que pueden incluir el despido.
Por tanto, si consumes marihuana fuera del horario laboral y no tiene ningún impacto en tu trabajo, el empleador no debería poder despedirte por ello. Pero si llegas a tu puesto bajo sus efectos y eso pone en riesgo el entorno o afecta tu rendimiento, el despido es una opción legal siempre y cuando se sigan los procedimientos establecidos.
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