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Duró dos días en un trabajo, la echaron y su venganza hizo que el negocio cerrara

La mujer planeó una venganza que le costó ir a juicio.

Spa
Spa
/Foto: Getty Images

Una joven se volvió viral después de haber pensado en una venganza sofisticada en contra de su exempleadora después de haberla echado en su segundo día de empleo.

La protagonista de esta historia, que ocurrió en Batley, Yorkshire, en Inglaterra, se llama Lauren Arafat.

En el año 2019 ella asistió a una entrevista para ser recepcionista en un centro estético y le fue bastante bien, por lo que la dueña del local decidió contratarla y ella misma fue quien le dio la inducción en su primer día de trabajo, en el que le enseñó a manejar un programa para agendar las citas de los clientes.

Luego, durante el segundo día, la empleadora notó algunos aspectos que no le gustaron de la joven, por lo que tomó la decisión de echarla.

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La Fiscalía, quien intervino en este caso, indicó que "en su segundo día de trabajo, se comportó de forma errática y hubo una serie de problemas que dieron lugar a que la propietaria iniciara una reunión de personal y luego resolviera echarla".

Lauren Arafat no estuvo de acuerdo con el despido, por lo que pensó en una forma de vengarse. Ella conectó su celular al sistema interno del centro estético y se hizo pasar por otro empleado y canceló más de 200 turnos programados, según dio a conocer el diario Examiner Live.

Lauren Arafat
Lauren Arafat
Foto tomada de examinerlive

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Lo que informó la Fiscalía, es que el actuar de la joven hizo que el negocio se fuera a la quiebra: "La dueña tuvo que llamar por teléfono a los clientes para volver a agendar sus citas y también averiguar si se habían borrado otras".

La propietaria del negocio contó que hizo todo lo que estuvo en sus manos para salvar su emprendimiento: "Lo intentamos todo con un costo financiero personal para mantenernos a flote, pero se trató una tormenta perfecta que forzó la bancarrota de mi negocio. En última instancia, destruyó por completo la reputación, los planes de futuro y otras posibilidades".

El juicio de este caso se llevó a cabo en el tribunal Leeds Crown Court y allí los miembros de la corte consideraron que la venganza de Lauren Arafat fue demasiado sofisticada y solo duró 30 minutos. Así mismo, no lograron comprobar que el actuar de la joven causara el cierre del spa.

Arafat se declaró culpable de delito en virtud del artículo 3 de la Ley "Computer Misuse Act": uso indebido de computadoras, actos no autorizados con la intención de perjudicar o con imprudencia para perjudicar el funcionamiento de una computadora.

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Por este motivo, el pasado 11 de mayo fue sentenciada a cumplir con 250 horas de trabajo comunitario sin remuneración y 15 días de "actividades de rehabilitación".

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