Gerardo Bedoya protagonizó un escándalo al norte de Bogotá cuando se encontraba disfrutando la final de la Copa Libertadores.El pasado 9 de diciembre, la novia del exjugador mandó comida para su mamá y la enviaron en un taxi. Sin embargo, pasó más de una hora y nunca llegó al lugar de destino.Te puede interesar: Polémicas palabras de Juan Darthés: "Fue ella la que se me INSINUÓ"La pareja de Bedoya localizó al taxista y lo llamó para pedir una explicación. El conductor regresó al lugar de partida, después de cinco horas. Cuando salieron al encuentro vieron el domicilio en el piso, lo que causó la ira de exjugador.“No vengo a justificarme, vengo a explicar lo que pasó (…) me empezó a decir que ustedes son unos rateros, unos ladrones. El señor me manoteó y ahí es un puño que le pego”, contó Bedoya mientras narraba los hechos.El exjugador pidió disculpas públicamente, pero dejó claro que quería dar su versión de lo sucedido.