Este decreto celestial sorprendió a los vecinos de Guanambi, una ciudad de 85.000 habitantes en el estado de Bahía (nordeste). Como los panes del Evangelio, la noticia se multiplicó por las redes sociales, acompañada de un diluvio de comentarios indignados, irónicos o incluso temerosos.
"Yo, Jairo Silveira Magalhães, alcalde de Guanambi, designado por Dios, elegido por el voto popular para el mandato de 2017-2020, decreto la entrega de las llaves de este municipio de Guanambi a Dios", proclamó el nuevo alcalde en el documento.
"Declaro que esta ciudad pertenece a Dios", añadió este alcalde del Partido Socialista Brasileño (PSB, centro) en el decreto "número 1" de su mandato, publicado el 2 de enero en el boletín municipal.
Subrayando que su "palabra es irrevocable", el alcalde "cancela en nombre de Jesús todos los pactos realizados con cualquier otro Dios" y advierte que todos los "gobernadores de este mundo tenebroso (...), en esta ciudad, estarán sujetos al señor Jesucristo de Nazaret" en persona.
El decreto sorprendió todavía más teniendo en cuenta que Magalhães no había hecho referencia a sus convicciones religiosas durante la campaña electoral, según los medios locales. Como se dice coloquialmente: peló el cobre.
Actualizado: enero 05, 2017 11:59 a. m.