George Michael, muerto a los 53 años, fue una superestrella mundial en los años ochenta, un cantante y compositor cuyas melodías almibaradas escondían una vida personal tormentosa, entre problemas de drogas y rupturas sentimentales. Tanto en el seno del dúo Wham como en solitario, compuso algunos de los grandes éxitos musicales de los ochenta, como "Careless Whisper" y "Faith", vendiendo más de 100 millones de discos a lo largo de casi cuatro décadas. En los últimos años, sin embargo, aparecía poco en público, y la prensa hablaba más de sus incidentes relacionados con las drogas que de su música. George Michael, que reveló públicamente su homosexualidad en 1998 tras su detención por atentado contra el pudor en unos aseos públicos de Los Ángeles, asumía su complicada vida privada. "La gente quiere verme como un personaje trágico, con relaciones sexuales en los aseos públicos y consumo de drogas", pero "yo ya ni siquiera considero eso como debilidades. Es simplemente quien soy", declaró al diario británico The Guardian en 2009. Georgios Kyriacos Panayiotou -su verdadero nombre- nació en el barrio londinense de East Finchley el 25 de junio de 1963, hijo de un grecochipriota y de una inglesa. Junto a Andrew Ridgeley creó Wham en 1981. Con su aspecto acicalado, su bronceado permanente, su peinado voluminoso y su imagen hedonista, supieron encarnar el espíritu de la época y se convirtieron pronto en uno de los mayores grupos británicos, con éxitos como "Club Tropicana" y "Wake Me Up Before You Go-Go". Estos son algunos de los mensajes con los que lo recordaron: