
El chiste de Ibrahim Salem que provocó un giro de 180 grados en su vida
Ibrahim Salem compartió el verdadero motivo que provocó su cambio de actitud con relación a su humor, además como esta situación afectó a un colega cercano de él

Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Ibrahim Salem, reconocido por su humor negro y su irreverencia en el escenario, pasó por los micrófonos de El Klub de la Kalle donde reconoció que tuvo una profunda transformación en su forma de expresarse, una decisión que va en la búsqueda de su paz a él y sus seres queridos.
La raíz de este cambió se debió a su polémica desatada por sus chistes sobre el atentado a la Escuela de Cadetes General Santander en el año 2019. Ibrahim relata que, aunque no era un empleado de planta de "Sábados Felices", sino un concursante activo o participante del Festival del Humor, fue "echado" del programa tras una seguidilla de tres chistes.
Puedes leer: Así fue como Isabella Ladera le contó a su mamá que publicarían su video con Beéle
El tercero de ellos, donde bromeaba sobre "policías acostados" y que "el chiste se iba a ir en bombas", fue la gota que rebosó el vaso. En ese momento, Ibrahim no entendía por qué lo culpaban, pues sentía que no había sido él quien puso la bomba. Sin embargo, con el tiempo y la reflexión, comprendió que la broma fue "en caliente", demasiado cercana a la tragedia, y que era necesario esperar a que "el muerto se enfriará".
Dichos chistes de Ibrahim Salem provocaron el llanto de su madre y su padre, un hecho que él describe como el único motivo por el que se arrepiente de sus acciones. "No puedo creer que lo que yo más amo hacer haga sufrir a mi familia", reflexiona en la entrevista.
Otro evento crucial que lo llevó a cambiar fue la afectación a su colega, Iván Marín. Ibrahim subió un video burlándose de Iván después de que este último publicara un video llorando por el atentado a la General Santander. Aunque este asegura que su intención era burlarse de Iván y no del atentado en sí, la gente lo malinterpretó.
Esta confusión escaló drásticamente, llevando a Iván y a su familia a vivir momentos muy difíciles. Según contó Ibrahim Salem, la gente insultó a Marín, les gritaba y les lanzaba cosas en la calle, incluso cuando estaban comiendo en familia. Por lo cual, este mencionó que este dolor ajeno, provocado indirectamente por sus palabras, lo hizo reflexionar y decir: "un chiste no tiene que llegar a eso".
Publicidad
Puedes leer: Omar Murillo y Koral Costa destapan la verdad sobre su sexualidad: "Mi esposo es gay"
El comediante explicó que ahora solo busca "estar tranquilo" y no está dispuesto a sacrificar su paz por contar "chistes malparidos" todo el día. Aunque puede compartir ese tipo de humor con amigos cercanos, se abstiene de subirlo a plataformas públicas. Su objetivo actual es hacer humor para trabajar, vivir de ello y entretener a la gente, evitando los problemas. En sus redes sociales, Ibrahim ya no comparte contenido escandaloso.
Publicidad
Reconoce una clara distinción entre el Ibrahim del escenario y el de las redes: mientras en sus shows mantiene su esencia, en el ámbito digital es más "prudente" y "evolucionado", cuidando lo que muestra. Ahora, piensa "seis veces" antes de actuar, no por él, sino para evitar las repercusiones negativas, como el cierre de cuentas o las amenazas, que ya ha experimentado.
Mira también: El chiste que casi le cuesta la vida a Ibrahim Salem: así lo amenazaron a él y a su madre