Con moretones en los ojos, los oídos, los hombros y la espalda quedó un niño al que su niñera metió en una secadora de ropa encendida, con el fin de reprenderlo.
La mujer identificada como Amber Chapman, tiene 35 años, y fue acusada por abuso infantil en los Estados Unidos, tras conocerse los detalles de los hechos. Según le contó el niño a las autoridades, la mujer lo metió en la maquina mientras esta estaba funcionando secando unas toallas.
El menor quien tan sólo tiene 4 años de edad, en medio de su discurso señaló que había dado 'vueltas y vueltas' en el electrodoméstico que no solamente estaba caliente sino que también tenia la puerta cerrada, negándole cualquier posibilidad de salir.
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Por suerte el niño fue llevado de emergencia al hospital para que sus heridas fueran examinadas lo antes posible; ahí el parte médico indicó que los golpes que tenía en los ojos, los hombres y su espalda baja coincidían con su testimonio, por lo que de inmediato la Policía del Condado de Lake emitió una orden de captura para la mujer que tendrá que enfrentarse a los cargos imputados de abuso infantil agravado.
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No obstante, por el momento Chapman fue dejada en libertad ya que pagó una fianza de quince mil dólares, que equivalen cincuenta y seis millones de pesos colombianos aproximadamente.
El caso ha generado conmoción en la comunidad, quienes tienen a la mujer 'entre ceja y ceja', pues e speran que la justicia la haga pagar por el acto descorazonado al que sometió al pequeño niño.