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Una buena noticia llegó para miles de familias bogotanas: ya comenzó el primer ciclo de pagos del subsidio de transporte escolar, una ayuda clave para garantizar el traslado de niñas, niños y jóvenes a sus colegios.
Este apoyo, liderado por la Secretaría de Educación del Distrito, busca aliviar el gasto familiar en movilidad, especialmente en sectores donde el acceso al transporte público puede ser más complejo o costoso.
Este año, se beneficiarán aproximadamente 18.800 estudiantes del Programa de Movilidad Escolar. El monto, calculado con base en los días de asistencia registrados entre el 27 de enero y el 21 de marzo, se abona a través de DaviPlata o la tarjeta TuLlave, según el canal elegido por cada familia. La suma total destinada para esta primera entrega es de $5.694 millones.
Las familias deben estar muy atentas a las fechas: quienes reciben el dinero por DaviPlata deben redimirlo antes del 26 de junio, mientras que los usuarios de TuLlave podrán validar su beneficio desde el 2 de junio hasta el 1 de julio. Pasadas esas fechas, no se podrá hacer uso del valor asignado.
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Para recibir el subsidio sin contratiempos, es fundamental que los datos del estudiante y su acudiente estén actualizados en el Sistema Integrado de Matrícula (SIMAT). Este paso es clave para asegurar que el abono llegue correctamente, ya sea al celular asociado a DaviPlata o a la tarjeta TuLlave personalizada con los datos del menor.
En el caso de DaviPlata, el abono se realiza al número celular vinculado con el documento del responsable del estudiante. En TuLlave, se carga a la tarjeta personalizada del SITP, vinculada al documento del estudiante inscrito en el programa. En ambos casos, las familias recibirán una notificación confirmando la disponibilidad del subsidio.
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Además de actualizar los datos, es recomendable conservar los comprobantes de las transacciones realizadas y estar pendientes de cualquier aviso o novedad desde la Secretaría de Educación. Este tipo de ayudas no solo representa un alivio económico, sino que también promueve la permanencia de los estudiantes en el sistema educativo.
El subsidio de transporte escolar es mucho más que un simple aporte monetario: es una muestra del compromiso del Distrito con el acceso equitativo a la educación. Facilita que niños y jóvenes lleguen puntualmente a clase, reduce la deserción escolar y contribuye a una ciudad más inclusiva.
Este tipo de programas demuestra cómo una gestión educativa enfocada en las necesidades reales de la población puede generar grandes impactos sociales. Por eso, aprovechar este beneficio requiere organización, atención a las fechas clave y, sobre todo, valorar el esfuerzo detrás de cada ayuda recibida.
Mira también: ¿Puedes acceder al subsidio Mi Casa Ya si estás reportado? ¡La respuesta te sorprenderá!
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