La polémica sacudió las redes sociales cuando Daneidy Barrera, conocida como Epa Colombia , reveló haber sido víctima de extorsión durante tres años por parte de una empresa que le ofrecía protección contra hackeos, servicio recomendado por su amiga Andrea Valdiri. Barrera compartió en Instagram su experiencia, exponiendo la estafa y agradeciendo a Yina Calderón por ayudarla a descubrir la verdad detrás de la situación.
La situación tomó un giro inesperado cuando Yina Calderón expuso públicamente el modus operandi de la presunta estafa. Calderón detalló cómo el presunto estafador, identificado como Abraham Karan, y quien según ellas fue "recomendado" por la barranquillera, prometía protección a los influencers por una cuota mensual, pero luego bloqueaba sus perfiles y les exigía más dinero para recuperar el acceso.
En respuesta, Abraham Karan defendió su trabajo de 15 años en redes sociales, refutando las acusaciones y asegurando que había ayudado a numerosas personas con sus perfiles. Además, recibió apoyo de figuras como Andrea Valdiri, Aida Victoria Merlano y La Jessu, quienes respaldaron su labor y rechazaron las acusaciones de extorsión.
La revelación de esta trama de extorsión ha generado un intenso debate en las redes sociales, con opiniones divididas entre aquellos que apoyan a Epa Colombia y Yina Calderón, y quienes respaldan a Andrea Valdiri y Abraham Karan. Mientras tanto, la comunidad de influencers sigue atenta a los desarrollos de este escándalo, que pone de manifiesto los riesgos y desafíos que enfrentan en el mundo digital.
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En medio de la controversia, queda claro que la transparencia y la prudencia en las relaciones comerciales en las redes sociales son más importantes que nunca. Los influencers deben ser conscientes de los posibles riesgos y buscar asesoramiento adecuado para proteger sus perfiles y mantener la integridad de su marca personal.
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