Policía de tránsito multó a su propio padre; el hombre enfurecido lo trató de mantenido

Una situación insólita ocurrida en la ciudad de Pujilí, Ecuador, se ha convertido en un fenómeno viral. Un agente de tránsito, en cumplimiento de su deber, se vio obligado a imponer una sanción a su propio padre luego de sorprenderlo cometiendo una infracción de tránsito. Sin embargo, lo que realmente capturó la atención de los internautas fue la reacción furiosa del padre al enfrentarse a la multa. En un video que se ha difundido ampliamente en redes sociales, se observa al padre descendiendo de su vehículo y lanzando duras palabras contra su hijo. "Yo soy su padre. es un malcriado, sinvergüenza, mantenido. Vive en mi casa, es mi herencia, malcriado, abusivo", le gritó el hombre en medio de la vía, visiblemente alterado por la situación. A pesar de los insultos y la presión emocional, el agente mantuvo la calma y procedió a cumplir con su trabajo, multando a su progenitor conforme a la ley.El hecho ha generado un intenso debate en redes sociales. Por un lado, muchos usuarios aplauden la firmeza y profesionalismo del policía al hacer cumplir la normativa sin favoritismos, destacando que la ley debe aplicarse a todos por igual, sin importar los lazos familiares. “Es un ejemplo de integridad y ética profesional”, comentaron algunos usuarios en plataformas como Twitter y Facebook.Por otro lado, también surgieron críticas hacia el joven agente, acusándolo de falta de lealtad familiar y de haber humillado públicamente a su padre. “Lo mínimo era haber dialogado en privado antes de multarlo”, expresó un usuario, reflejando la postura de quienes consideran que debió manejarse la situación de otra manera.La historia pone de relieve los dilemas éticos a los que pueden enfrentarse los servidores públicos cuando el deber y los lazos personales entran en conflicto. Mientras el video sigue acumulando miles de reproducciones, la discusión en torno a este caso parece lejos de terminar. La situación se ha convertido en un ejemplo del difícil equilibrio entre la responsabilidad profesional y la dinámica familiar, dejando claro que, en ocasiones, la ley no conoce de parentescos.Delincuentes robaron a los compradores de una panadería