La locutora australiana Kate Langbroek compartió en su cuenta de Instagram una fotografía que le puso los pelos de punta a todos sus seguidores. A primera vista parece una selfi normal, pero cuando se ve a los espejos aparece algo terrorífico.
Cuenta Kate que se estaba mudando a un apartamento en Italia ubicado en un antiguo palacio, parte de él construido en 1300, y que cuando fue a ver el progreso encontró, junto a una amiga, unos espejos, al parecer del 1700. Allí quisieron sacarse una foto con el fin de ver “si aparecía algo”.
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Lo que no esperaban era que sí, en la foto parece verse al fondo la figura de un espanto vestido de blanco. Incluso algunos usuarios creen ver dos fantasmas.
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Otros más escépticos creen que se trata de una coincidencia o que sabían de antemano lo que iba a salir. Sin embargo, no deja de generar curiosidad la “horrible” imagen que sale.
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