
Un impresionante operativo de rescate tuvo lugar en la localidad de Saratoga Springs, Nueva York, cuando un caballo de 22 años, llamado Sly, cayó en un estanque congelado y quedó atrapado en el agua gélida.
El incidente ocurrió el pasado lunes 24 de febrero a las 3:45 de la tarde, cuando el animal, que jugaba cerca del estanque junto a otros caballos, rompió la capa de hielo y no pudo salir por sí mismo.
Su propietaria, Ali Ernst, quien acababa de regresar del trabajo, notó la ausencia de Sly entre los otros caballos y descubrió que había caído al agua. Sin dudarlo, sostuvo la cabeza del animal fuera del agua mientras esperaba ayuda.
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Poco después, los oficiales Kris Camarro y Dominic Martuscello del Departamento de Policía de Saratoga Springs llegaron al lugar y, con la ayuda de vecinos y familiares, iniciaron un operativo para sacar al caballo del agua. Utilizando cuerdas y trabajando en equipo, lograron finalmente llevar al animal a tierra firme.
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Una vez fuera del estanque, Sly logró ponerse de pie y fue trasladado a un granero cercano para recibir atención veterinaria. Afortunadamente, pese al peligroso episodio, el caballo se encuentra en recuperación y su dueña ha tomado medidas para evitar futuros incidentes. “Ahora hay una cerca eléctrica alrededor del estanque”, afirmó Ernst.
El Departamento de Policía de Saratoga Springs destacó el trabajo en equipo y la determinación de quienes participaron en el rescate , enfatizando el compromiso de la comunidad para proteger la vida animal en situaciones de emergencia.
¡Impresionante! 😯❄️ Un equipo de policía estadounidense realizó el rescate de un caballo que se había caído en un pequeño lago congelado en Nueva York. pic.twitter.com/c1CRaRJBbQ
— Meganoticias (@meganoticiascl) March 4, 2025
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Este no es el único caso reciente de un animal en peligro por caer en un estanque congelado. El pasado 13 de febrero, en Missouri, los bomberos del Distrito de Protección contra Incendios del Condado Cooper y del Departamento de Bomberos de Boonville rescataron a Bonnie, un perro que sufrió una situación similar.
En ese caso, el teniente Tyson Fahrenbrink ingresó al agua con un traje especializado para salvar al can en menos de 20 minutos.
Estos casos reflejan los peligros que representan los cuerpos de agua congelados durante el invierno, tanto para animales como para personas . La rápida intervención de rescatistas y comunidades es clave para evitar tragedias y garantizar la seguridad de todos.
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