La Selección Colombia ha demostrado estar en un nivel muy alto, sobre todo manteniendo un invicto de 28 fechas sin perder, dejando claro que era uno de los equipos más opcionados a llegar a la final, objetivo que después de 23 años logró.
El partido contra Uruguay fue uno de los mejores de la Copa, si no el mejor, ya que enfrenta a quienes para muchos eran los equipos que mejor juegan , por lo que se llamó una final adelantada. En este sentido, el partido era crucial y Colombia pudo mantenerlo hasta el primer tiempo , haciendo un gol de cabeza de Lerma, pero desafortunadamente los jugadores uruguayos sabían que podían desequilibrar a Daniel Muñoz , quien por un codazo vio la tarjeta roja.
El segundo tiempo fue muy tenso para Colombia, quien se defendió contra las cuerdas y logró mantener el resultado 1 a 0 arriba, pasando a la final, esto es algo que hace mucho no pasaba y que tiene ilusionados a los colombianos.
El momento más glorioso del fútbol colombiano en este torneo llegó en 2001. Ese año, Colombia fue anfitriona de la Copa América y, ante su público, logró alzar el trofeo por primera y única vez en su historia. La victoria en 2001 no solo significó el reconocimiento continental, sino también un hito inolvidable para los aficionados y una fuente de orgullo nacional.
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Además del prestigio y la gloria deportiva, el aspecto económico también juega un papel importante. Según la tabla de premios publicada por la Conmebol , el equipo que quede subcampeón recibirá un premio de 7 millones de dólares . Colombia ya tiene asegurado este monto por llegar a la final. Además, por participar en el torneo, el equipo ya ha ganado 2 millones de dólares , y otros 2 millones adicionales por alcanzar los cuartos de final. Estos incentivos económicos refuerzan la importancia de cada etapa del torneo y el esfuerzo realizado por los jugadores y el cuerpo técnico.
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