Los padres del joven de 21 años responsable de un feminicidio en Italia rechazan verlo

Los padres del joven acusado de haber asesinado a Giulia Cecchettin, cuyo feminicidio conmocionó a Italia, han declinado hoy visitar a su hijo en la prisión de Verona (norte) en la que se encuentra, tras ser extraditado después de una fuga frustrada a Berlín.

De acuerdo con los abogados del presunto asesino, Filippo Turetta de 21 años, los padres han preferido no verse cara a cara con su hijo y recibir antes preparación psicológica, sobre todo después de que el brutal caso haya abierto un intenso debate sobre la violencia machista, especialmente entre las generaciones más jóvenes.

Giulia Cecchettin, de 22 años, fue presuntamente asesinada hace más de dos semanas por su exnovio en el norte Italia, según revelaron las cámaras de vigilancia de una zona industrial en las que se veía como el chico la golpeaba repetidamente mientras ella le decía: "Me haces daño" y la arrastraba varios metros por el suelo.

La joven iba a graduarse de ingeniería biomédica y, de acuerdo con varios conocidos, su expareja llegó a pedirle que abandonara algunas asignaturas y rebajara su rendimiento académico para no dejarle en mal lugar.

Cecchettin despareció junto a su exnovio, Filippo Turetta, el pasado sábado 11 de noviembre cuando salieron en coche a cenar a un restaurante de comida rápida.

Tras arduas labores de búsqueda, el cadáver fue localizado este sábado en un canal junto al lago Barcis y la autopsia reveló que había sido acuchillada en la cabeza y el cuello, a pesar de que ella intentó defenderse, pues en los brazos y en las manos se detectaron heridas.

El presunto autor del crimen, aún pendiente de juicio, huyó después en ese mismo automóvil y consiguió llegar hasta la periferia de Berlín, donde fue detenido y trasladado en avión a Italia.

De acuerdo con los medios de comunicación italianos, que continúan dedicando portadas y grandes espacios de programación al caso, Turetta habría admitido en declaraciones espontáneas que había matado a "su ex novia" y que "quería pagar lo justo" por el crimen.

Días después de confirmarse la muerte de la joven, decenas de miles de italianos protestaron por el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, en las calles de Roma, con hasta medio millón de manifestantes, Milán, Turín y otras grandes ciudades del país.

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