El fallecimiento de Érika Morales, la joven de 20 años que desde 2021 quedó cuadripléjica tras recibir dos botellazos en un bar, genera consternación en el país no solo por la lucha que tuvo que dar para que le aprobaran la eutanasia, sino porque sus agresoras aún se encuentran en libertad.
La situación de salud de la mujer dio un giro a sus 17 años cuando en una noche de rumba tuvo una discusión con dos mujeres quienes terminaron agrediéndola en el baño del bar, con dos botellazos en la cabeza que la dejaron en coma durante año y medio y posteriormente quedó con una cuadriplejia, de la que los médicos no dieron esperanzas de recuperación.
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Y aunque Érika siempre luchó para recuperarse y se las arregló para comunicarse con sus familiares, la recuperación nunca llegó y por el contrario su estado se deterioró a un punto que se vio obligada a pedir la muerte asistida debido a que no soportaba los dolores y el estado que cada vez era peor.
Finalmente la eutanasia le fue aprobada a la joven en medio de una presión mediática ya que su caso se dio a conocer en todo el país, despertando reacciones de indignación por negarle la solicitud a la joven; y a pocos días del visto bueno Érika cerró sus ojos para siempre.
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Érika Morales no alcanzó a recibir la eutanasia
El fallecimiento de Érika se confirmó en la tarde des sábado 1 de marzo, casi una semana después de que recibiera la noticia de que podía acceder al derecho de morir dignamente; sin embargo, la incertidumbre sobre cómo murió se mantuvo durante ese día.
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Pues la familia, en medio del dolor por la pérdida de su ser querido no aclaró si la joven falleció de forma natural o si finalmente fue sometida a la eutanasia en medio de la privacidad.
Esta incógnita fue resuelta el domingo cuando apareció una publicación en la cuenta de Facebook de Tatiana Morales, hermana de Érika, quien aclaró que su ser amado no alcanzó a recibir el procedimiento.
En su mensaje la joven aclaró que el estado de salud de su hermana se deterioró en los últimos días y su deceso de produjo por causas "naturales" debido al estado de salud que presentaba la mujer; es por esto que Érika no había alcanzado a realizarse el proceso de eutanasia ya que su cuerpo colapsó antes de que se terminaran los trámites se programara la fecha.
La hermana de la mujer, en medio del dolor, le hizo una promesa a Érika a quién, en honor a su memoria seguirá luchando para que el caso se reactive judicialmente y las mujeres señaladas paguen por el daño causado.
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