Un descuido, acabó con la vida de un pequeño de tan solo siete meses de nacido, que murió ahogado en una tina, mientras su mamá se arreglaba las uñas en el garaje de la casa.
El hecho ocurrió el pasado 20 de mayo, en la ciudad de Miami, mientras el bebé identificado como Prince Mejía, se bañaba junto a su hermano de 3 años. La madre, una joven de 22 años, los dejó solos en la tina por 10 minutos, mientras se pintaba las uñas y cuando regresó se encontró con una terrorífica escena; su hijo menor flotaba en el agua su hermano jugaba.
De acuerdo a las declaraciones que la mujer, identificada como Alyssa Jimmie, dio en el juzgado, el sifón de la bañera no se encontraba tapado; sin embargo cuando ella regresó al baño, se encontró con la tina completamente llena de agua, por lo que al parecer alguien lo habría tapado, indicando que su hijo mayor sabía como hacerlo.
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Según fuentes locales la mujer acudió desesperada a la casa de sus vecinos buscando ayuda y de paso aprovechó para llamar al 911. Por otra parte, de acuerdo al informe emitido por los médicos, cuando el bebé llegó al centro médico presentaba un latido de 45 minutos, y aunque fue auxiliado por tres días, su corazón dejó de latir. Por lo tanto, la mujer ahora tendrá que enfrentarse a graves cargos.
"Estos han sido días difíciles, Alyssa ha sido una buena hija, siempre ha sido una maravillosa hermana, una hija amada...ella no hizo esto a propósito" expresó el padre de la joven quien se ha mantenido al pie del cañón brindándole su apoyo en esta difícil situación.
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