El hecho se presentó en zona rural de Palermo (Huila), cuando Quintero Mosquera se, en compañía del mayordomo, atendía a una burra que estaba en labor de parto, de un momento a otro el animal de una mordedura le arrancó la nariz y le propinó las demás heridas en el cuerpo, a punta de patadas. “Cuando llegamos Constantino ya estaba mal. El animal le había arrancado la nariz, al parecer de un mordisco y en el brazo tiene una herida profunda. Recibió muchos golpes del animal”, afirmó el concejal de Palermo Arquímedes Vargas al diario La Nación. Vecinos del sector llegaron con hamacas a auxiliarlo, lo montaron en la parte trasera de una camioneta y lo trasladaron a la clínica. Rumbo a urgencias se encontraron una ambulancia, pero, al parecer, el hombre ya estaba muerto. “En ese momento llegué a recogerlo en la camioneta, nos vinimos para ver si encontrábamos la ambulancia de camino, cuando llegó el vehículo de emergencias, prácticamente acababa de morir”, añadió el funcionario.
