Una particular historia capta la atención en Argentina donde habitantes de una población aseguran que una extraña y mítica criatura raptó a un niño de tres años e intentó ahogarlo en un lago lejano a su hogar.
Los hechos se presentaron el 13 de abril en la provincia de Corrientes donde una mujer alertó la desaparición de su niño de tres años, quien se encontraba frente a su casa con su perro de compañía .
Tras varias horas de búsqueda una vecina escuchó el ladrido del perro y al acercarse vio al niño dentro de una laguna luchando por su vida. La mujer sin pensarlo se lanzó al agua y rescató al menor de edad quien finalmente pudo volver sano y salvo a su hogar.
Publicidad
Sobre esta extraña desaparición se inició una investigación y en medio de los testimonios recolectados , habitantes del sector y familiares del niño señalan a un ser mitológico como el responsable del rapto e intento de asesinato.
El Pombero es la criatura que tanto los padres como vecinos señalan del rapto. Aseguran que en el recorrido que habría hecho el niño para llegar a la laguna había marcadas unas extrañas huellas en zigzag y las cuales son relacionadas con el “monstruo” mítico .
Publicidad
Mariela Escalante es la mamá del niño presuntamente raptado y en diálogo con autoridades y medios locales asegura que no es la primera vez que un niño desaparece extrañamente y luego aparece lejos de su hogar.
“Él nunca se iba lejos de casa. Caminó casi tres kilómetros, atravesó siete alambrados y dos montes para llegar allí”, relató la mamá del niño al asegurar que es imposible que haya realizado esta travesía por sí solo .
Las autoridades indagan para determinar con exactitud qué fue lo que ocurrió con el niño, mientras habitantes insisten que es obra del Pombero .
Publicidad
Cabe recordar que El Pombero es un duende de la mitología guaraní del que se dice que acostumbra a “ secuestrar niños ”, y en esta población suelen creer bastante en su “ aparición para hacer de las suyas ”.
La mayoría de ciudadanos asegura que supuestamente lo ha visto más de una vez rondando por las calles esperando a que los adultos se descuiden con sus hijos.
Publicidad