El drama de una joven terminó convirtiéndose en una historia de optimismo y superación que le da la vuelta al mundo debido a la lucha de la mujer que, tras perder parte de un órgano, logró volver a llevar una vida normal.
Se trata de Charlotte Webster-Salter, una joven de 27 años, nacida en Inglaterra y quien a los 24 años comenzó a presentar quebrantos de salud que le cambiaron su vida por completo.
Según la propia versión de la mujer, en 2018 se percató de unas úlceras que le salieron en su boca, a las que no les prestó atención ya que pensó que se trataba de alguna reacción a algún alimento picante o que se había lastimado cepillándose los dientes.
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Pero las úlceras no desaparecieron con el paso de los meses, sino que, por el contrario, se volvieron más visibles y molestas para la mujer; además comenzó a presentar cambios que la llevaron a acudir al médico.
Pues Charlotte Webster comenzó a sentirse más cansada de lo habitual y a tener una pérdida inexplicable de peso.
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Al consultar a los médicos decidieron realizarle una biopsia que arrojó un resultado desgarrador: cáncer.
La mujer fue informada que tenía un tumor canceroso que crecía en su lengua llamado carcinoma de células escamosas.
“Me reí cuando me lo dijeron, estaba tan sorprendida que no sabía cómo reaccionar. El cáncer era lo más alejado de mi mente”, escribió Charlotte en sus redes sociales.
Debido a la gravedad de la enfermedad y una hinchazón en la lengua que ya afectaba su respiración, la mujer fue sometida a cirugía para extirpar el tumor, además de una traqueotomía, que consiste en una abertura en el cuello con un tubo insertado para ayudarla a respirar.
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En medio de la operación y la joven le extirparon casi la mitad de su lengua la cual fue reconstruida con partes de su pierna.
Antes de la cirugía la joven sacó tiempo para compartir con sus seres queridos y prepararlos para algún resultado desalentados tras la operación, como perder el habla.
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“Nadie sabía realmente cuál sería el resultado: perder la capacidad de hablar era lo que más me asustaba”, confesó la mujer.
La operación salió bien, pero ese mismo día Charlotte tuvo que ser sometida a otra intervención quirúrgica, con una duración de cuatro horas, debido a que su nueva lengua perdió el suministro de sangre.
La segunda operación fue exitosa ya que lograron salvar el órgano con la parte implantada y la mujer, luego de una larga recuperación, logró recuperar el habla y vivir normalmente con su lengua injertada.
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La mujer logró adaptarse tan bien a este órgano con parte de su pierna que, incluso, comparte su experiencia en redes donde muestra con orgullo su lengua y hasta revela que “tengo en la boca pecas que estaban en mi pierna”.
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