Andreas Graf, de 36 años, perdió a su esposa tras un repentino problema cardiaco y quedó solo a cargo de su hijo de 5 años , quien padece de leucemia. Y ahora sin su esposa, no tiene mucho tiempo para estar pendiente del menor, pues necesita trabajar para mantenerlo. Sus compañeros se conmovieron con su situación , por lo que decidieron trabajar horas extras para ayudarlo.
Graf después de hablar con los médicos que atendían a su hijo, le recomendaron dedicarle un año entero al niño con el objetivo de hacerle un tratamiento intensivo para que se recuperara, al punto de que pudiera volver al colegio, ya completaba 9 meses hospitalizado.
Por eso decidió dar todo por su pequeño y optó por abandonar su trabajo. Sin embargo, cuando pasó la carta de renuncia se encontró con el gran corazón de sus compañeros que con su acción solucionaron su problema.
Publicidad
Fue la encargada de recursos humanos quien sugirió a los empleados y les ofreció trabajar horas extras con el fin de cubrir el horario que Graf, de esta manera el padre podría seguir recibiendo su salario. Fueron 650 trabajadores los que se unieron a la linda causa, sin reprochar e inclusive sin conocer al padre.
Tras dos semanas hicieron 3.264 horas y media, lo suficiente para que el hombre pudiera pagar sus gastos y los del pequeño por un año entero.
Publicidad
“Sin esta tremenda ayuda, estaría sin trabajo ahora” , dijo llorando Graf, mientras le agradecía a sus compañeros de trabajo.
“No hubo ni una sola persona que no donara”, dijo la encargada de recursos humanos.