Un video perturbador que muestra a agentes de Jacksonville, Florida, golpeando y arrastrando a William McNeil Jr., un hombre afroamericano de 22 años, desde su vehículo durante una parada de tránsito ha desatado una ola de indignación a nivel internacional.
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Las imágenes, grabadas por el propio McNeil desde el interior de su automóvil, se volvieron virales, encendiendo un intenso debate sobre el uso de la fuerza policial y las versiones contradictorias de los hechos. Abogados de derechos civiles acusan a las autoridades de falsificar el informe de arresto, mientras que la Oficina del Sheriff de Jacksonville pide no sacar conclusiones precipitadas.
El incidente, ocurrido en febrero pero difundido recientemente, muestra a McNeil sentado en el asiento del conductor, pidiendo hablar con un supervisor antes de que los agentes rompieran la ventanilla de su auto.
Según el video, McNeil recibe un puñetazo en la cara, es sacado a la fuerza del vehículo, golpeado nuevamente y arrojado al suelo. Los abogados de McNeil, Ben Crump y Harry Daniels, sostienen que el video es una clara evidencia de brutalidad policial, especialmente preocupante en un momento donde el escrutinio sobre el uso de la fuerza, particularmente contra personas de color, es elevado.
Sin embargo, el jefe policial de Jacksonville, T.K. Waters, ha instado a la cautela, afirmando que el video viral no muestra el contexto completo de la situación. Waters, en una conferencia de prensa, admitió que los agentes emplearon fuerza, pero argumentó: “Que la fuerza sea injusta no significa que sea ilegal o contraria a la política”.
Advirtió contra un "juicio apresurado" que podría llevar a conclusiones erróneas, defendiendo a sus oficiales de lo que considera una "agenda antipolicial".
Videos adicionales de la cámara corporal de la policía, publicados por la Oficina del Sheriff, ofrecen una perspectiva más amplia del incidente. Estas grabaciones muestran a McNeil abriendo la puerta de su auto para hablar con un oficial, quien le informa que fue detenido por conducir sin luces delanteras ni cinturón de seguridad.
McNeil objeta la razón de la parada, negándose a entregar su licencia y cerrando la puerta con llave cuando se le pide que salga del vehículo. Waters indicó que a McNeil se le advirtió siete veces que estaba bajo arresto y que debía abrir la puerta.
Las imágenes de la cámara corporal revelan que, segundos antes de la irrupción, otro agente advierte que romperán la ventanilla, lo que se lleva a cabo de inmediato. Aunque las imágenes de la cámara corporal no muestran el puñetazo inicial, los abogados de McNeil afirman que su cliente sufrió una fractura dental, conmoción cerebral y traumatismo craneoencefálico, así como deterioro cognitivo y déficit de memoria a corto plazo.
McNeil fue arrestado y acusado de resistencia a un agente sin violencia, conducir con licencia suspendida y posesión de marihuana. A pesar de que se declaró culpable de los cargos de resistencia y licencia suspendida al día siguiente, sus abogados insisten en que en el momento de ser arrastrado, McNeil tenía las manos en alto y no parecía resistirse, solo preguntaba "¿Cuál es su razón?".