Un serio debate se despertó en Colombia tras revelarse la muerte de la joven Catalina Gutiérrez Zuluaga, una médica residente de la especialización de cirugía en la Universidad Javeriana, en Bogotá.
Los hechos, ocurridos el miércoles 17 de julio, desataron una oleada de reacciones entre las que se conocieron varias denuncias sobre acoso laboral y maltrato hacia residentes de esta profesión.
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Incluso, salió a la luz un escrito que dejó la joven antes de tomar la l amentable decisión y en la que se evidenciaría que, presuntamente, era víctima de maltrato y exigencias extremas para cumplir con sus prácticas.
“A todos los residentes, gracias. De cada uno me llevo muchas enseñanzas. Siempre los llevaré en mi corazón. Ustedes pueden. Ánimo. CGZ”, dice la nota escrita por Catalina y que hace parte de la investigación que busca determinar cómo y por qué ocurrieron los hechos, que además motivaron a varios profesionales y estudiantes del área de la salud a alzar su voz y dar a conocer situaciones que viven por parte de compañeros y superiores.
¿Quién era Catalina Gutiérrez Zuluaga?
Pese al arduo debate al rededor de las situaciones que habrían provocado la decisión de Catalina, los detalles del hecho se han mantenido bajo gran hermetismo y aún no es claro o conocido públicamente cómo ocurrió la situación; pues lo más importante es llegar a la razón de los hechos para prevenir futuros desenlaces lamentables.
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Sin embargo, en medio del dolor, varios allegados a la joven han dejado conocer algunos detalles de su vida, al mencionarla en conmovedores mensajes de despedida en los que destacan el gran carisma y profesionalismo que la caracterizaba.
Se conoció que Catalina Gutiérrez se graduó de bachiller en el año 2017 del Colegio Granadino, ubicado en Villa María, Caldas, meses después llegó a Bogotá a estudiar medicina con la especializad en cirugía.
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En el año 2018 inició sus estudios en la Universidad Javeriana y este 2024 había iniciado su año rural en el Hospital San Ignacio de Bogotá, el cual es requisito para profesionalizarse en el área de cirugía.
En los mensajes y fotos que han publicado en homenaje a la residente, se destaca que Catalina era una joven estudiosa y apasionada por su profesión, lo cual reflejaba a través de su dedicación a su trabajo y sus pacientes.
Según denuncias, que están siendo investigadas, la joven durante sus meses de residencia enfrentó situaciones de presión bajo un supuesto ambiente laboral de malos tratos que la llevaron a sentirse desesperada al no querer dejar sus estudios, pero tampoco soportal los acosos.
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