La prematura muerte del estudiante Julián Cantillo de la Universidad del Atlántico, tras caer del sexto piso de uno de los edificios del plantel educativo, sigue causando conmoción. Sobre todo, lo que más ha llamado la atención de la comunidad digital es la divulgación de una imagen con unas palabras que habrían sido presuntamente escritas por el estudiante.
El mensaje, que según medios locales fue publicado minutos antes de su muerte, en su estado de WhatsApp, decía: "Nunca tuve la confianza de subir una foto mía. De hecho, de hecho nunca tuve la confianza para siquiera tomarme una foto, Hoy traté de vestirme y arreglarme lo mejor posible para que por lo menos mi cuerpo se vea decente", cuando lo vengan a recoger y aún así sigo viéndome asqueroso... Después de hoy ya no me tendré que preocupar por verme al espejo y ver a un idiota insociable".
Una de los aspectos que más llamó la atención en este mensaje es que el estudiante habría decidido vestirse de forma 'especial', pero aún así habría enfatizado en sus problemas de autoestima; "Sigo viéndome asqueroso", es la frase que más caló y taladra la mente de quienes se están enterando de la situación.
Según comentarios de los usuarios e internautas el mensaje lleva implícito un grito silencioso que, lamentablemente, pasó desapercibido. La imagen y el mensaje que acompañaban esta última publicación también provocaron una oleada de comentarios sobre la urgencia de abordar la salud mental, especialmente en los jóvenes.
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¿Qué le pasó a Julián Cantillo, estudiante de la Universidad del Atlántico?
En circunstancias que aún están bajo investigación de las autoridades, el jueves 22 de agosto, el estudiante cayó desde el sexto piso del bloque D de la Sede Norte de la universidad, en un hecho que conmocionó a toda la comunidad educativa. Pese a que fue trasladado rápidamente a la Clínica Portoazul, no logró sobrevivir a las heridas.
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Uno de los comentarios más destacados en redes sociales sugiere que en el mensaje del estudiante "se lee la desesperanza de un joven que, a pesar de haberse 'vestido y arreglado lo mejor posible', seguía sintiéndose 'asqueroso'. Esta autopercepción distorsionada refleja un conflicto interno profundo que requería ayuda, y que, de haber sido atendido a tiempo, podría haber cambiado el desenlace de esta historia".
Hoy, la familia, amigos y compañeros de Julián Cantillo enfrentan un dolor indescriptible, mientras las redes sociales siguen llenas de mensajes de condolencias y de apoyo a familias que puedan estar pasando por una situación similar.
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