Luly Bossa una de las actrices con más reconocimiento a nivel nacional decidió hablar abiertamente sobre los diversos procedimientos estéticos que se ha realizado en su cuerpo a lo largo de su vida.
Uno de ellos son los implantes mamarios, que desde hace un buen tiempo se le han convertido en todo un dolor de cabeza , ya que gracias a estos se le han presentado varios inconvenientes que comprometen su salud.
En una entrevista que le reveló a un reconocido medio de comunicación nacional la mujer contó cómo había tomado la decisión de enfrentarse a aquel procedimiento.
“Qué podía mejorar, era lo que yo veía cuando salía del baño. No fue por una vanidad o moda, sino que yo dije pues si hagámosle y esa fue la primera vez que me puse” dijo la actriz.
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Tiempo después Luly volvió al quirófano para cambiarse los implantes, pero en esa ocasión n o todo salió como ella esperaba, ya que en medio del procedimiento el medico quien estaba a cargo del procedimiento se dio cuenta que una de las siliconas se había reventado.
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Antes de la cirugía le habían hecho algunos estudios y varias ecografías pero en ninguna de ellas se mostraron que los implantes presentaran algún tipo de problema por lo que el cambio de las siliconas sería un proceso normal.
“No salía nada en la ecografía, el médico que me operó después dijo que hubo una mala praxis”, señaló.
Y por si fuera poco, para desgracia de la actriz, el problema no acabó en ese instante pues en el cambio de implantes, por unos más pequeños, le quedaron restos de la anterior silicona en su pecho y esta se adhirió al nuevo implante.
Por suerte, hasta el momento la actriz no ha sentido la necesidad de reemplazar o retirar sus implantes, sin embargo sabe que existe un riesgo.
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En la entrevista, la mujer reveló que c onstantemente es señalada y criticada por conservar los implantes a su edad, además porque más adelante estos le podrían generar de nuevo inconvenientes a su salud.
No obstante, parece que dichos comentarios a ella le entran por un oído y le salen por el otro, pues ella considera que "hay que envejecer con dignidad".
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"Si la dignidad está en las tetas, pues póngaselas”.
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