La reconocida cantante barranquillera, Shakira Isabel Mebarak Ripoll, compareció ante los tribunales españoles admitiendo su culpabilidad en un caso de fraude fiscal que la mantenía en la mira de la justicia.
La artista, de 46 años, acordó con la Fiscalía una pena de tres años de cárcel, que se mantendrá en suspenso y que podría ser evitada a cambio de una cuantiosa multa de 7,3 millones de euros, aproximadamente 8 millones de dólares, según lo comunicado por el tribunal de Barcelona.
La colombiana, vestida con un traje rosa y gafas de sol, llegó al tribunal poco antes de la audiencia, donde se le imputaban cargos por no haber pagado impuestos durante los años que residió en la ciudad catalana. Frente a la pregunta directa sobre si reconocía su culpabilidad, Shakira respondió con un conciso "Sí".
El acuerdo alcanzado entre la artista y la justicia española permitirá a Shakira evitar ir a la cárcel, pero deberá hacer frente a una significativa sanción económica. La decisión de aceptar los cargos se hizo pública a través de un comunicado emitido por los abogados de la cantante.
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Shakira, por su parte, también emitió un comunicado explicando su elección de admitir la culpabilidad como una medida para salvaguardar su carrera y la de sus hijos, evitando un prolongado proceso judicial.
En la comunicación la artista señaló las dos opciones que enfrentaba: continuar la batalla legal, comprometiendo su tranquilidad y la de sus seres queridos, o llegar a un pacto que le permitiera cerrar este capítulo y mirar hacia el futuro sin obstáculos legales.
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Cabe destacar que la Fiscalía inicialmente solicitaba una pena de ocho años y dos meses de cárcel, junto con una multa sustancial de 23,8 millones de euros (aproximadamente 25,85 millones de dólares). Estos cargos estaban relacionados con la omisión de pago de impuestos en España durante los años 2012, 2013 y 2014, así como el uso de un elaborado entramado de sociedades en paraísos fiscales para eludir sus obligaciones tributarias.
Con este acuerdo, Shakira logra cerrar un capítulo legal que amenazaba con extenderse por años, permitiéndole enfocarse nuevamente en su carrera artística y en su vida personal. La noticia ha generado reacciones mixtas entre sus seguidores, mientras la artista busca dejar atrás este controvertido episodio.
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