En la ciudad de Rugby, Warwickshire, en Inglaterra, una madre de 48 años llamada Lisa Boothroyd, perdió un diente luego de confundir totes de pólvora con golosinas.
Cuando se disponía a comprar algunos dulces confundió la caja de los bombones con una mini caja de pirotecnia y al morder un tote sintió un estallido en la boca que le quitó un diente y le quemó parte de la encía.
El objetivo de Lisa era compartir el mecato con sus vecinos que por fortuna no probaron los supuesto dulces.
La madre de familia tuvo que consumir analgésicos para calmar el dolor y mejorar poco a poco.
“Sentí que mi boca estaba en llamas por varias semanas, apenas podía comer o dormir”, comentó la mujer al diario Mirror de Reino Unido.
Mum who ate fireworks thinking they were popping candy suffers chemical burns https://t.co/aCQ01pSpyo pic.twitter.com/kobFSBk1h9
— The Mirror (@DailyMirror) January 18, 2021
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