Una joven, que se dedica a hacer videos en TikTok, contó una experiencia que vivió en el transporte público y que la dejó impactada justo cuando empezó a espiar la conversación de un chico que iba a su lado.
Camila Medina, de Tucumán, Argentina , contó a detalle cada uno de los mensajes que vio y describió esta anécdota, por medio de un video que ya recoge más de 106 mil reproducciones, como: "Yo no busco el chisme, el chisme viene a mí".
En su relato, la joven explicó que se había subido a un bus con su madre, el cual estaba lleno, razón por la que tuvo que irse de pie durante todo el trayecto; sin embargo, consiguió la forma de pasar el rato mientras llegaba a su destino.
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"A la par mía había un chico, y no sé qué se piensa porque siempre que conversan con alguien se ponen el celular lejos de ellos, porque siempre hay viejas por ahí y ellos deben pensar 'estas viejas tienen más miopía que ganas de vivir, por lo que no van a ver lo que yo pongo'. Sí, las viejas pueden tener miopía, pero yo miro de diez", manifestó Camila.
Tras varios intentos de visualizar lo que estaba chateando, la joven descubrió que el chico estaba teniendo una pelea con su novia por una presunta infidelidad que cometió. Lo anterior le generó repudio y la motivó a exponer la situación en redes sociales.
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No obstante, el caso tomó un rumbo inesperado en el instante en que una usuaria comentó lo siguiente: "El joven es mi hermano y terminaron. También contó de una chica (Camila) que no le dejaba de mirar su celular", agregó Kiara Mansilla entre risas.
La tiktoker, por su parte, respondió con otro clip: "En mi defensa, yo pensaba que el chico no se había dado cuenta (...) Cada vez alejaba más su celular porque pensaba que yo tenía miopía. Yo quería saber qué pasó, qué le dijo la novia", concluyó.
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