Por lo menos una vez en la vida las mujeres y hasta los hombres han llorado o han sentido ansiedad y tristeza después de tener sexo, claro está sin importar si la pasaste de maravilla, a eso se le conoce como disforia poscoital. Sin importar si la pasaste de maravilla.
Según un estudio publicado por Wiley Periodicals, Inc, reveló que varias mujeres aseguraron sentirlo algunas veces mientras tenían sexo o después de terminar.
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La Dra. Marie Tudor, sexóloga médica explicó a El Huffington Post que “es probable que suceda después de un orgasmo o que con ese orgasmo también puede haber una liberación de emociones y, para algunas personas, eso implica llorar”.
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Además, otra de las razones es el incremento de endorfinas y la producción de oxitócina y prolactina pueden provocar este sentimiento. La liberación de dopamina, responsable de la excitación sexual, hará que tengas un bajón de ánimo pasajero.
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