María José tenía 4 meses de edad y una pelea de celos entre su madre y Alexander Ospina desató su muerte.
El pasado sábado, tras la discusión desapareció en manos de su padrastro. En su primera versión, el hombre aseguró que había regalado a la menor, pero las autoridades fueron mucho más allá para encontrar la verdad.
Los días pasaban y la recompensa por el paradero de la pequeña llegó a $20.000.000 millones de pesos, pero fue su propio agresor el que confesó el siniestro.
“Durante la captura el señor Alexander manifestó haberle quitado la vida a la menor y haber sepultado el cuerpo en zona montañosa del municipio de Chía, hecho que fue confirmado por las unidades de investigación criminal de la Policía de Cundinamarca”, explicaron las autoridades.