Desde el primero de agosto un significativo cambio en la normativa de facturación electrónica afecta no solo a los usuarios de servicios públicos, sino también a los apostadores de juegos de azar en Colombia. La Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (DIAN) emitió las resoluciones 008 de 2024 y 165 de 2023, que establecen la obligatoriedad de la facturación electrónica para todos los servicios públicos en el país.
Esto incluye sectores como el gas, agua, luz y telecomunicaciones, además de los juegos de azar. El propósito de esta medida es modernizar las transacciones y mejorar la gestión tributaria en todo el territorio nacional. Las empresas de servicios públicos deberán adaptar sus sistemas para cumplir con esta normativa, lo que representa un desafío considerable para muchos.
No obstante, el impacto más sorprendente se sentirá entre los apostadores de chances y loterías, quienes deberán acostumbrarse a recibir sus boletos y comprobantes de manera electrónica.
Desde el 1 de agosto, las facturas de gas, energía, electricidad y telefonía se enviarán de forma electrónica a los clientes. Esto implica que ya no se recibirán facturas físicas en la puerta de casa, lo que ha generado incomodidad entre muchos usuarios que prefieren el método tradicional. Sin embargo, la medida se extiende más allá de los servicios públicos, alcanzando a los juegos de azar.
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Cambios en los juegos de azar
A partir del 1 de septiembre, la normativa también afectará a todos los juegos de suerte, exceptuando los juegos localizados. Esto significa que los boletos, fracciones, formularios, cartones, billetes o cualquier otro instrumento relacionado con los juegos de azar deberán entregarse electrónicamente. Los apostadores tendrán que adaptarse a este nuevo sistema, lo que ha generado preocupación y dudas sobre la confiabilidad y seguridad de las transacciones electrónicas.
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Los apostadores frecuentes de chances y loterías están inquietos por la implementación de esta nueva medida. Muchos se preguntan si este cambio será un buen respaldo a la hora de ganar. La preocupación principal radica en la posible dificultad para acceder a los comprobantes electrónicos y la fiabilidad del sistema en caso de errores técnicos.
Además, la transición hacia un sistema completamente digital puede ser complicada para aquellos que no están familiarizados con la tecnología. Los apostadores mayores, en particular, podrían enfrentar desafíos significativos al intentar adaptarse a esta nueva forma de recibir sus boletos y comprobantes de juego.
Se espera que las empresas desarrollen y desplieguen sistemas eficientes para la entrega electrónica de facturas y boletos. Es fundamental que estas empresas ofrezcan soporte adecuado a sus clientes durante este período de transición, proporcionando información clara y asistencia técnica para garantizar una adaptación suave al nuevo sistema.
Aunque tiene el objetivo de modernizar las transacciones y mejorar la gestión tributaria, su impacto en los apostadores de juegos de azar genera incertidumbre y preocupación. La adaptación a esta nueva normativa requerirá esfuerzo tanto por parte de las empresas como de los usuarios, quienes deberán acostumbrarse a un sistema completamente digital para continuar participando en sus juegos de suerte favoritos.
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