En la tarde de este viernes, Juan Carlos Saldarriaga, alcalde de Soacha, confirmó que el cuerpo rescatado del Salto del Tequendama pertenece a Gerardo Lino Segura Franco, oriundo de San Antonio del Tequendama, de 47 años, trabajador del sector."Lamentamos comunicar que se halló el cuerpo sin vida del señor Gerardo Segura, quien se lanzó con su carro al Salto del Tequendama", tuiteó el alcalde.“Hoy, sobre las 11:57 a. m. fue encontrado el cuerpo sin vida de este ciudadano [Gerardo Segura]. Están en las labores de rescate para poder entregarlo a su familia. Paz en la tumba de este señor y tranquilidad a su familia”, agregó. Con esta confirmación, la búsqueda se daría por finalizada, pues según las autoridades no existen reportes de desaparecidos y Gerardo, al parecer, iba solo en el vehículo.¿Quién era Gerardo Segura, conductor del vehículo que cayó al Tequendama?Lo que se sabe del empresario es que al día siguiente del siniestro cumpliría 48 años, y que tanto él como sus familiares y amigos cercanos tenía planeada una celebración para este fin de semana.Actualmente era el gerente de un reconocido restaurante ecológico en San Antonio del Tequendama, el cual cuenta con gran flujo de clientes, así como un amplio personal para atender todos los servicios de ecoturismo y gastronomía que ofrece el lugar.Gerardo logró gran reconocimiento gerenciando este lugar debido a que es bastante visitado por empresas, colegios, grupos de universitarios y hasta grupos de motociclistas y de carros que llegan para disfrutar de aventuras ecológicas.En diferentes oportunidades Segura fue entrevistado por medios locales que quisieron conocer más sobre el lugar gerenciado por el hombre que ahora se encuentra desaparecido y quien, según algunos residentes del lugar, "siempre recibió con una sonrisa y los brazos abiertos a quienes llegaban a conocer su negocio".Pero el restaurante y ecoparque no fueron el único gran logro de Gerardo, pues años atrás se involucró en el mundo de la política y logró llegar a ser concejal de San Antonio del Tequendama, por el partido Liberal.El hombre, amante de la naturaleza, de los paisajes y de las aventuras naturales, tiene dos hijos adolescentes quienes viven junto a su mamá en Soacha debido a facilidades para sus trabajos y estudio; horas antes de que el carro en el que iba Gerardo cayera al Salto del Tequendama había estado en casa de su familia visitando a sus hijos hasta la medianoche cuando salió rumbo a su casa, por lo que familiares consideran que posiblemente pudo tratarse de un micro sueño.Te puede interesar:
Un reciente hallazgo aumentó la actividad de autoridades en el Salto del Tequendama donde sobre el mediodía de este viernes personal de rescate encontró un cuerpo sin vida en la zona de búsqueda donde en la madrugada del miércoles cayó un carro con su ocupante. Pues en medio de la búsqueda del exconcejal y empresario Gerardo Segura, quien se dice que ocupaba el vehículo al momento del siniestro, personal de Bomberos de Cundinamarca ubicó un cuerpo sin vida, sin confirmarse si se trata del hombre mencionado. Inmediatamente se activó el protocolo de levantamiento y rescate del cadáver para su posterior identificación; de ser confirmado que el cuerpo corresponde a Gerardo Segura, las labores de búsqueda de cuerpos terminarían debido a que las autoridades descartaron en la mañana de este viernes que el hombre viajara con acompañante en el momento de caer al vacío.El hallazgo se da luego de tres días de intensas búsquedas hasta altas horas de la noche sin obtener mayores resultados frente a la persona que estaría en el carro al momento del siniestro; pues los expertos en búsqueda y rescate solo habían logrado ubicar el carro completamente destruido, pero sin marcas de sangre ni rastro de cuerpos. Con el paso de las horas la incertidumbre sobre la suerte del conductor fue creciendo debido a que en el vehículo y sus alrededores no se encontraron rastros de sangre, lo que ponía en duda la versión de que hubiese alguien al volante cuando el carro cayó por el abismo a mas de 500 metros. Sin embargo, dentro del carro Chevrolet Aveo de color rojo, con placas RMW 778, fue hallado un celular que correspondería al empresario y el cual quedó en custodia de las autoridades que indagan los hechos para buscar información que los lleve a esclarecer el caso.
Más de 48 horas completa una intensa búsqueda en el Salto del Tequendama donde presuntamente estarían el cuerpo sin vida de un hombre que supuestamente estaba dentro del carro rojo que cayó al vacío en la madrugada del miércoles 21 de septiembre. Este caso, además de impactante, se ha convertido en un gran misterio, especialmente para autoridades y familiares del conductor del vehículo, debido a que tras hallar el carro siniestrado a más de 500 metros, no hay rastro del hombre.Pues en medio de las investigaciones las autoridades establecieron que quien iba conduciendo el carro Chevrolet Aveo de color rojo, con placas RMW 778, era un hombre de 47 años identificado como Gerardo Segura; sin embargo al no haber pistas de su cuerpo sin vida, los investigadores y rescatistas contemplan la posibilidad de que posiblemente no estaba dentro del vehículo al momento de caer por el abismo. Las labores de búsqueda han llevado a identificar el punto en que cayó el carro, pero del hombre solamente han encontrado dos celulares que presuntamente corresponderían a él y que ya están en poder de autoridades para una minuciosa inspección que pueda dar alguna pista sobre los hechos.En medio de la búsqueda, familiares, cercanos, empleados y vecinos de Segura lamentan los hechos y no dejan de preguntarse ¿por qué un hombre considerado exitoso y además querido por muchos habría tomado la decisión de lanzarse en su carro al Salto del Tequendama? Pues aunque aún no se ha establecido si el hombre se suicidó, se accidentó o solo se deshizo de su auto, son varios detalles de su vida los que han salido a la luz, dando a conocer que Gerardo Segura era un hombre trabajador y muy apreciado por las personas que lo conocían. Lo que se sabe del empresario es que al día siguiente del siniestro cumpliría 48 años, y que tanto él como sus familiares y amigos cercanos tenía planeada una celebración para este fin de semana. Pues actualmente era el gerente de un reconocido restaurante ecológico en San Antonio del Tequendama, el cual cuenta con gran flujo de clientes, así como un amplio personal para atender todos los servicios de ecoturismo y gastronomía que ofrece el lugar. Gerardo logró gran reconocimiento gerenciando este lugar debido a que es bastante visitado por empresas, colegios, grupos de universitarios y hasta grupos de motociclistas y de carros que llegan para disfrutar de aventuras ecológicas. En diferentes oportunidades Segura fue entrevistado por medios locales que quisieron conocer más sobre el lugar gerenciado por el hombre que ahora se encuentra desaparecido y quien, según algunos residentes del lugar, "siempre recibió con una sonrisa y los brazos abiertos a quienes llegaban a conocer su negocio". Pero el restaurante y ecoparque no fueron el único gran logro de Gerardo, pues años atrás se involucró en el mundo de la política y logró llegar a ser concejal de San Antonio del Tequendama, por el partido Liberal. El hombre, amante de la naturaleza, de los paisajes y de las aventuras naturales, tiene dos hijos adolescentes quienes viven junto a su mamá en Soacha debido a facilidades para sus trabajos y estudio; horas antes de que el carro en el que iba Gerardo cayera al Salto del Tequendama había estado en casa de su familia visitando a sus hijos hasta la medianoche cuando salió rumbo a su casa, por lo que familiares consideran que posiblemente pudo tratarse de un micro sueño. Escucha el podcast de farándula y entérate de los chismes más sonados
Un lamentable accidente en Armenia, Quindío, dejó a una familia sumida en el dolor tras la muerte de un bebé de apenas 9 meses, quien falleció luego de ingerir un adorno navideño. A pesar de los esfuerzos médicos durante tres días, el pequeño no logró superar las complicaciones ocasionadas por el objeto.El hecho ocurrió el pasado domingo 17 de noviembre en una vivienda ubicada en el occidente de la ciudad. Según informaron las autoridades, el menor estaba bajo el cuidado de sus abuelos cuando, en un momento de descuido, tomó una bola navideña, la introdujo en su boca y terminó tragándola.Desesperados, los familiares trasladaron al niño al área de urgencias de la clínica La Sagrada Familia, donde los médicos le brindaron atención inmediata; sin embargo, a pesar de los esfuerzos realizados, su organismo no resistió, y su fallecimiento fue confirmado el miércoles 20 de noviembre alrededor de las 6 p.m.El caso, inicialmente atendido por agentes del CAI La Unión de la Policía Nacional, fue asumido posteriormente por la Seccional de Investigación Criminal (Sijín). Los uniformados realizaron la inspección técnica del cadáver en el depósito de la clínica antes de trasladarlo a la morgue de Calarcá para las diligencias correspondientes.Inician investigaciones para entregar el cuerpo del bebéLa necropsia del menor fue realizada este jueves 21 de noviembre en horas de la mañana por personal del Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses. Una vez completados los procedimientos, el cuerpo fue entregado a sus familiares para darle el último adiós.Este lamentable suceso ha encendido las alarmas sobre los riesgos que presentan los adornos navideños, especialmente para los más pequeños. En esta época del año, marcada por celebraciones y decoraciones coloridas, es importante que los padres y cuidadores redoblen las medidas de seguridad en sus hogares para evitar accidentes similares.Puedes ver | Marcela Reyes y Juan Sebastián Navarro jugaron ¡Basta!
Un lamentable accidente ocurrido la mañana de este jueves, 21 de noviembre, en la Autopista Norte de Bogotá, dejó un saldo fatal que enluta a una familia. Un árbol, debilitado por la fuerte ola invernal, cayó sobre varios motociclistas que transitaban por la zona, cobrando la vida de una joven que se desplazaba como pasajera en una motocicleta de la aplicación ‘Picap’.El siniestro ocurrió a las 8:45 a. m. a la altura de la calle 243, en sentido sur-norte. La emergencia generó el cierre total de la autopista mientras los organismos de socorro atendían la situación. Entre los afectados, además de la joven fallecida, se reportaron al menos 12 lesionados, quienes sufrieron caídas por el impacto de ramas o al intentar evitar el accidente.El conductor de la moto se encuentra recuperándose de las lesiones en un centro médico."Hoy fue mi hija, que no le pase a nadie más", dijo a Blu Radio, el padre de la joven. Armando Quintero, padre de la joven fallecida, se pronunció con dolor y frustración tras el accidente. En una entrevista con Blu Radio, hizo un llamado urgente a las autoridades para que se tomen medidas preventivas respecto al mantenimiento de los árboles en la ciudad."Uno nunca sabe cuándo es el último adiós, cuándo es el último saludo y la última cena. (...) Ojalá, Dios quiera, que lo que le sucedió a mi hija no le suceda a nadie más. Por favor, que la Alcaldía Mayor de Bogotá haga el mantenimiento de los árboles. Hoy fue mi hija. Que no le suceda a nadie más", expresó Quintero conmovido.Emergencia y caos en la zonaEquipos de Bomberos de la estación Bicentenario acudieron al lugar para brindar atención prehospitalaria a los afectados y trabajar en la remoción del árbol caído. Las autoridades de tránsito recomendaron tomar vías alternas, como la carrera Séptima, debido al cierre del corredor vial.Puedes ver | Marcela Reyes y Juan Sebastián Navarro jugaron ¡Basta!
La tierra volvió a moverse en Colombia la noche de este jueves 21 de noviembre. A las 7:03 p.m., un temblor de magnitud 4,0 fue registrado por el Servicio Geológico Colombiano, con epicentro en el municipio de Tona, en el departamento de Santander. Este movimiento telúrico, aunque de intensidad moderada, fue percibido en varios municipios cercanos, generando una lluvia de comentarios entre los habitantes de la región.Epicentro y alcance del movimiento telúricoEl sismo tuvo su origen en Tona, y se sintió en municipios cercanos: a 12 kilómetros de Santa Bárbara y 18 kilómetros de Floridablanca, otros municipios santandereanos que también sintieron el remezón. La profundidad del temblor, estimada en 182 kilómetros, ayudó a que su impacto se distribuyera ampliamente, pero sin causar mayores daños en la superficie.A pesar de su relativa lejanía, el movimiento no pasó desapercibido para los residentes de Bucaramanga y municipios aledaños, quienes rápidamente recurrieron a las redes sociales para compartir su experiencia. Algunos reportaron haber sentido vibraciones fuertes en edificios altos, mientras que otros mencionaron que el sismo los tomó por sorpresa mientras realizaban actividades cotidianas.Reacciones y balance tras el sismoEl evento no generó mayores afectaciones. Las autoridades locales y organismos de emergencia confirmaron que no hubo pérdidas humanas ni daños significativos en la infraestructura de las zonas afectadas. De igual forma, no se emitieron alertas especiales, aunque se mantiene el monitoreo preventivo de la actividad sísmica en la región.Vale la pena mencionar que el departamento de Santander, ubicado sobre el Nido Sísmico de Bucaramanga, es una de las zonas con mayor actividad tectónica en el país. Este fenómeno natural, aunque inquietante, forma parte del día a día de sus habitantes, quienes están acostumbrados a recibir movimientos telúricos de diferentes magnitudes con relativa frecuencia.
El nombre de Jhon Viáfara es recordado por muchos en Colombia y el mundo del fútbol por sus destacadas participaciones, especialmente cuando fue parte del histórico título de la Copa Libertadores con el Once Caldas en 2004. Sin embargo, su legado deportivo se ha visto opacado por un oscuro capítulo de su vida que lo llevó a ser condenado a 11 años de prisión en Estados Unidos. La pregunta es clara: ¿por qué un exfutbolista exitoso terminó involucrado en actividades ilícitas? La respuesta está en una red de narcotráfico que lo arrastró, y un viejo amigo que lo introdujo en este mundo.'El Papá': El hombre que introdujo a Viáfara al narcotráficoEl vínculo de Viáfara con el narcotráfico no es algo fortuito ni reciente. Según las investigaciones de las autoridades colombianas y estadounidenses, esta relación comenzó por medio de Jaider Díaz Carabalí, conocido como 'El Papá', un hombre que fue amigo de la niñez del futbolista. Ambos crecieron en Robles, un pequeño corregimiento de Jamundí, Valle del Cauca, en donde compartieron su juventud. Sin embargo, mientras Viáfara seguía su camino hacia la fama en el fútbol, Díaz cayó en las redes del narcotráfico y comenzó a operar con carteles mexicanos y centroamericanos, usando su negocio de maquinaria pesada como fachada.La ambición de Viáfara que lo llevó al narcotráficoDíaz, quien se había convertido en un capo del narcotráfico, buscó a su antiguo amigo para que lo ayudara a coordinar envíos de cocaína hacia Estados Unidos. Viáfara, por su parte, no estaba atravesando un buen momento financiero tras su retiro del fútbol y aceptó la oferta de 'El papá', quien le prometió una vida de lujo.Fue entonces cuando el exfutbolista se convirtió en un operador de la red de narcotráfico, coordinando reuniones con narcotraficantes y facilitando el transporte de la droga.La caída y la extradiciónEntre 2016 y 2019, la organización de 'El Papá' fue desmantelada en varios operativos, con incautaciones de cientos de kilos de cocaína. Durante las investigaciones, Viáfara fue identificado como 'El Futbolista', un alias que le fue asignado debido a su reconocimiento público. A pesar de su intento de defenderse alegando que había sido víctima de un montaje, las pruebas en su contra fueron contundentes, y en 2020 fue extraditado a Estados Unidos.Allí, fue condenado por conspiración para importar y distribuir cocaína, recibiendo una sentencia de 11 años de prisión. Mientras su vida se desmoronaba, su antiguo amigo, 'El Papá', eludió la justicia por un tiempo, refugiándose en las montañas del Cauca. No obstante, fue capturado y ahora enfrenta una extradición a Estados Unidos, donde podría encontrarse con Viáfara en algún penal.Puedes ver | Netflix anunció que realizará una docuserie sobre James Rodríguez
Jhon Eduis Viáfara Mina, quien alguna vez brilló en los estadios del mundo y fue clave en la histórica victoria del Once Caldas en la Copa Libertadores de 2004, hoy enfrenta una realidad muy distinta. Desde una prisión en Atlanta, Estados Unidos, cumple una condena de 135 meses tras declararse culpable en noviembre de 2020 de conspiración para importar más de cinco kilogramos de cocaína a territorio estadounidense.Viáfara, conocido por su talento en equipos como América de Cali, Portsmouth de Inglaterra y Real Sociedad en España, dejó una huella imborrable en el fútbol colombiano. Su gol en la final de la Libertadores contra Boca Juniors fue el primero en abrir el camino hacia un título histórico. Sin embargo, la gloria futbolística quedó empañada al ser extraditado en 2019 por cargos relacionados con narcotráfico y concierto para delinquir.Las investigaciones revelaron que, entre 2017 y 2018, Viáfara formó parte de una organización criminal vinculada al envío de cocaína hacia Estados Unidos. Según las autoridades, esta red, que mantenía nexos con el cartel de Sinaloa, utilizaba embarcaciones rápidas y aeronaves para transportar la droga. Durante las operaciones, se incautaron 2.5 toneladas de cocaína, valoradas en cerca de 28 millones de dólares, y se capturaron 20 personas.Un fenómeno recurrenteEl caso de Viáfara no es aislado. La reciente aprobación de la extradición del exfutbolista Rolan de la Cruz por la Corte Suprema de Justicia de Colombia refuerza una triste realidad: algunos ídolos del deporte han terminado involucrados en actividades ilícitas. De la Cruz, quien militó en equipos como Independiente Santa Fe y Deportivo Cali, enfrenta cargos similares en Estados Unidos por ser parte de una red de narcotráfico desde 2016.El traslado de De la Cruz a territorio estadounidense solo espera la firma del presidente Gustavo Petro. Este caso revive las historias de jugadores como Viáfara, quienes pasaron de ser íconos deportivos a protagonistas de crónicas judiciales.Reflexiones desde la cárcelDesde su celda, Viáfara ha compartido reflexiones sobre su caída en entrevistas con medios como La Patria. Reconoce los errores que lo llevaron a perder su libertad y el impacto de sus decisiones en su vida y la de sus seres queridos. A pesar de su situación, su nombre permanece ligado al recuerdo de aquel glorioso Once Caldas que desafió las probabilidades y conquistó América.La historia de Jhon Viáfara es un recordatorio de cómo las malas decisiones pueden transformar radicalmente una vida de éxito, dejando preguntas sobre el entorno y las circunstancias que empujan a figuras públicas hacia caminos oscuros.Mira también: Nelson Velásquez condenado a pagar cárcel