Actualmente, Santiago Cruz es considerado uno de los artistas colombianos más reconocidos y consolidados. Al pensar en él, muchos lo asocian con una imagen de seriedad, compromiso profesional y una fuerte conexión con su familia. Sin embargo, su camino no siempre fue tan claro. Hace aproximadamente 20 años, atravesó una etapa muy difícil marcada por la drogadicción.
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Desde hace 18 años logró superar esa adicción y ahora, cada vez que habla del tema, lo hace con la intención de dejar una lección. En su más reciente aparición en The Juanpis Live Show, se abrió sobre esa parte de su vida. “Hablo de esto porque quizás hay alguien en el público o viéndonos que está pasando por lo mismo y puede pensar: ‘si este tipo lo logró, yo también puedo’”, comentó.
Muchos lo conocieron gracias a su tema Baja la guardia, una canción que no solo destacó por su voz, sino también por su capacidad para escribir letras profundas. Aunque muchos creyeron que era una súplica de perdón a una mujer, la realidad es diferente.
La inspiración de esa canción proviene de su proceso de recuperación. Específicamente, se relaciona con uno de los 12 pasos del programa de rehabilitación, que implica pedir disculpas a todas las personas que uno ha dañado.
“Me imaginé un lugar lleno de sillas ocupadas por aquellos a quienes lastimé y me pregunté: ¿qué quiero que ellos comprendan? Lo primero que deseaba dejar claro es que nunca fue mi intención hacerles daño. No quería afectar a nadie, pero yo estaba muy mal, y cuando uno está roto, inevitablemente termina rompiendo a otros”, confesó.
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Hoy en día, Santiago Cruz no solo ha reconstruido su vida personal y profesional, sino que también se ha convertido en una voz de apoyo y esperanza para quienes enfrentan batallas similares. Su testimonio, lejos de ser una historia oscura del pasado, es un ejemplo de resiliencia y transformación. Con cada entrevista y cada canción, refuerza el mensaje de que es posible salir adelante, sanar y reencontrarse con uno mismo.
Además de su música, ha participado activamente en campañas de concientización sobre salud mental y adicciones, reafirmando su compromiso con temas que alguna vez lo tocaron de forma personal. Su historia demuestra que, incluso en los momentos más oscuros, el arte y la voluntad pueden convertirse en caminos hacia la luz.
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