En la mañana del martes 9 de julio, unsismo de magnitud 3.5 sacudió el departamento de Santander, Colombia, causando alarma entre los residentes de la región. Según el Servicio Geológico Colombiano (SGC), el evento sísmico se registró a las 8:11 a.m., teniendo su epicentro en El Litoral del San Juán, cerca de Docordó.
El movimiento telúrico, que se originó a una profundidad de 65 kilómetros, fue percibido con notable intensidad en diversos municipios. Entre las áreas donde se sintió el temblor destacan el eje cafetero, Pereira, Chocó y algunos municipios del Valle del Cauca. La sacudida sorprendió a muchos residentes que iniciaban su jornada, generando momentos de incertidumbre y preocupación.
A pesar de la intensidad con la que se sintió el sismo en varias localidades, hasta el momento no se han reportado afectaciones significativas. Las autoridades locales y los organismos de emergencia han confirmado que no se han producido daños materiales de consideración ni heridos. Esta noticia trae alivio a los habitantes de la zona, quienes están acostumbrados a convivir con la constante actividad sísmica de la región.
El sismo se produjo en una de las regiones con mayor actividad sísmica de Colombia, lo que explica la frecuencia con la que estos fenómenos ocurren. Los residentes de Santander y sus alrededores están habituados a recibir recomendaciones de preparación y respuesta ante sismos, lo que contribuye a minimizar los riesgos y a mantener la calma en momentos de emergencia.
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El Servicio Geológico Colombiano continúa monitoreando la situación y se mantiene alerta ante posibles réplicas. En su comunicado, el SGC enfatizó la importancia de estar preparados y seguir las recomendaciones de seguridad para estos eventos. Entre las medidas recomendadas están tener un plan de emergencia familiar, identificar las zonas seguras dentro de las viviendas y mantener a la mano un kit de emergencia.
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