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Tres golpes en la cabeza con un martillo, el extraño ritual tras la muerte de un papa

El fallecimiento de un papa activa una serie de rituales ancestrales, incluyendo tres golpes con un martillo de plata, ¿cuál es su significado?

Extraño ritual tras la muerte de un papa
Extraño ritual tras la muerte de un papa
/Foto: AFP

Cuando un papa fallece, se activan una serie de rituales que han perdurado a lo largo de los siglos . Uno de los más llamativos es el de los tres golpes con un martillo de plata en la frente del Pontífice, una tradición que aún se mantiene, aunque hoy en día tiene un carácter más simbólico.

El encargado de llevar a cabo esta ceremonia es el camarlengo, quien pronuncia el nombre del papa tres veces mientras da los leves golpes.

Después de esto, pronuncia la frase en latín: "Vere Papa mortuus est" (Verdaderamente, el Papa está muerto). Esta declaración marca el inicio de los procedimientos para la elección de su sucesor, aunque en el caso de Benedicto XVI, al haber renunciado en vida, no se convocó un cónclave.

La destrucción del anillo del pescador

Otro de los rituales más representativos tras la muerte de un papa es la destrucción del anillo del pescador, que servía como sello papal.

Tradicionalmente, se inspecciona el anillo para certificar su autenticidad, luego el camarlengo lo marca con una cruz y finalmente se golpea con un mazo sobre un bloque de plomo hasta romperlo. Los fragmentos se guardan en una bolsa de terciopelo y se entierran junto al Pontífice.

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En el caso de Benedicto XVI, este procedimiento fue diferente. Cuando renunció en 2013, su anillo fue destruido en ese momento, marcando simbólicamente el fin de su pontificado. Sin embargo, se presume que los restos del anillo fueron conservados hasta su fallecimiento para ser enterrados con él.

Por último, el cuerpo del papa es vestido con los paramentos pontificios, incluyendo la mitra blanca en la cabeza, la casulla roja –color de luto en la tradición papal– y la estola blanca con cruces negras, símbolo de su dignidad.

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Todo esto forma parte de un protocolo que ha sido seguido durante siglos y que, con algunas variaciones , sigue vigente hasta hoy.

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