El reconocido actor vallecaucano Andrés Parra ha marcado huella en el mundo de la actuación por su versatilidad y habilidad para dar vida a personajes complejos. En una reciente entrevista en El Klub de La Kalle, el actor habló sobre los roles que ha interpretado y, sorprendentemente, reveló cuál sería un personaje que preferiría evitar. Durante su participación en El Klub de La Kalle, conducido por Jhovanoty, Andrés Parra explicó que siente una conexión especial con los personajes, especialmente aquellos que existieron en la vida real. "Creo en las energías de los personajes, sobre todo si ya no están en el plano terrenal", comentó el actor. Esta conexión espiritual es algo que Parra toma muy en serio, al punto de realizar ciertos rituales antes de interpretar un nuevo papel."Lo primero que hago ahora es algún tipo de ritual para pedir permiso" confesó. "Le digo al man aquí estoy, úseme", añadió entre risas, dejando claro que se toma muy en serio la responsabilidad de encarnar personajes históricos.Luis Alfredo Garavito, un reto que no intimida a Andrés ParraEl tema se tornó aún más interesante cuando uno de los integrantes del programa, Leo Cuervo, le preguntó si se resistiría a interpretar a ciertos personajes, como Luis Alfredo Garavito, conocido como uno de los asesinos en serie más infames de Colombia. La respuesta de Parra fue sorprendente: "A mí ya los personajes no me importan, le hago a lo que sea".De manera firme, el actor señaló que su enfoque ha cambiado con el tiempo. Ahora, su decisión de aceptar un papel se basa más en el equipo de producción que en el personaje en sí. "Pero a Garavito le hago, el que quiera, el que sea", afirmó Parra, dejando claro que no le temblaría la voz al encarnar a uno de los criminales más temidos del país.Walter Mercado, un reto que prefiere evitarJhovanoty, el conductor de El Klub le preguntó si había algún personaje que le hubiera gustado interpretar. Aquí es donde Parra hizo una confesión que sorprendió a todos: "Yo soñaba con hacer a Walter Mercado", admitió. Sin embargo, rápidamente reveló la razón por la que descartó ese proyecto: "Tengo un tema con los prostáticos".Para aclarar el término, Manuela Cardona, otra integrante del programa, explicó que los "prostáticos" son las prótesis que se adhieren a la piel para cambiar la apariencia del rostro. Parra, quien ya había tenido que usar algunas para interpretar a Hugo Chávez en la serie El comandante, explicó "imagínese haciendo a Walter Mercado ya viejito, ¡eso son 10 horas de maquillaje!". Además, bromeó sobre las múltiples capas de vestuario que tendría que usar: "Y por ahí unas 15 en vestuario por tantas capas que se ponía".Andrés Parra, el actor que ha logrado encarnar a figuras tan icónicas como Pablo Escobar y Hugo Chávez, sigue sorprendiendo con su disposición a asumir retos complejos, sin importar la naturaleza del personaje.
Un angustiante e inesperado momento se presentó en medio del programa La RED, de Caracol Televisión, en su emisión de este domingo 29 de septiembre cuando uno de los presentadores reveló que en su niñez tuvo contacto con Luis Alfredo Garavito, el mayor depredador de menores de edad en Colombia.Se trata del presentador Carlos Vargas, quien siempre se ha destacado por su carisma, profesionalismo y espontaneidad que lo llevan a resaltar donde se encuentre; sin embargo, en esta reciente oportunidad el comunicador hizo una inesperada confesión que dejó a todos sus compañeros y televidentes sorprendidos. Pues Vargas, en medio de una dinámica de preguntas, reveló una experiencia desagradable y angustiante en la que alcanzó a ser raptado por Luis Alfredo Garavito, más conocido como 'La bestia', y por poco se convierte en una víctima más de las que dejó este monstruo en los años 90'. Carlos Vargas fue engañado por GaravitoEl relato se dio cuando el presentador recordó que estudiaba en un colegio de Cartago, Valle del Cauca, y asegura que constantemente veía rondando al hombre que años después fue conocido a nivel mundial por las atrocidades que cometía. Además relató que en una de las salidas del colegio hacia su casa Garavito se le acercó y lo persuadió.Con total seriedad Carlos Vargas reveló que un día el hombre se le acercó y le habló sobre un loro y unos dulces que tenía para regalarle, ante lo que logró convencerlo de irse con él a recoger los regalos; sin embargo, al darse cuenta que se estaban yendo hacia una zona solitaria a las afueras de Cartago, decidió escapar del sujeto.En medio de su revelación el presentador recordó que sintió mucho miedo por lo que decidió no continuar avanzando con el hombre e irse corriendo a su casa mientras que, curiosamente, el sujeto no lo obligó a continuar y lo dejó escapar. Además, entre risas, contó que al llegar a casa su mamá le pegó por haberse ido con un extraño.El presentador de La RED expresó que tuvieron que pasar muchos años para darse cuenta que el hombre que lo intentó raptar con engaños era nada más y nada menos que Luis Alfredo Garavito, el mayor agresor de menores de edad en Colombia. El testimonio de Vargas tomó por sorpresa a sus compañeros y televidentes quienes expresan conmoción por el relato y lo cerca que estuvo el querido presentador de ser víctima del repudiable hombre que acabó con los sueños de más de 200 niños, y quien murió en prisión en 2023 sin haber pagado su condena y sin haber esclarecido todos sus delitos.También puedes ver: Repudio en redes contra 'Culotauro' por comentario sobre la Gorda Fabiola
Han pasado nueve meses desde que Colombia sintió un alivio al conocerse el fallecimiento de Luis Alfredo Garavito, un depredador de niños que en los años 90' acabó con la vida de cerca de 200 menores de edad en el país y en Ecuador. Y pese a estar pagando su condena en la cárcel de máxima seguridad La Tramacúa, en Valledupar, la existencia del llamado 'Monstruo' o 'Bestia' era motivo de constante preocupación por parte de ciudadanos que cada cierto tiempo se dejaban llevar por el rumor de que Gravito estaba cerca de lograr libertad, tras haber cumplido gran parte de la pena y además por tener un comportamiento ejemplar tras las rejas. Esta libertad nunca se dio y el depredador de niños murió en prisión consumido por un cáncer que lo llevó a perder un ojo y a una delgadez extrema de la que muy pocos cercanos a él se conmovieron.Pero antes de su desaparición Luis Alfredo concedió una última entrevista que se sumó a solo tres que dio en su vida; esta última se convirtió en el relato más cercano de lo que era 'El monstruo', quien sintió confianza en el periodista que lo acompañó, por teléfono y en persona, a lo largo de casi cuatro años.Sobre los detalles de esta entrevista, lograda por los periodistas Kevin Pinzón y Rafael Poveda, del programa Testigo Directo, hay varios podcast y hasta dos libros que revelan imágenes y vivencias que tuvieron con uno de los hombres más detestados en la sociedad. Pero entre las experiencias durante este largo y agotante trabajo con el 'Monstruo', el periodista Kevin Pinzón reveló recientemente un regalo que recibió de Garavito y que, según se infiere, sería uno de los objetos más preciados del depredador de niños.Se trata de una Biblia que lo acompañó durante más de dos décadas y que con el tiempo fue remplazada por otras; sin embargo, este libro sagrado nunca lo desechó y lo conservó hasta que decidió entregárselo a quien fue su último entrevistador.El periodista asegura que desde que recibió dicho libro religioso nunca lo había abierto y lo conservó hasta este mes de julio cuando, en su podcast 'Conducta delictiva', decidió abrirla y revelar el contenido que encontró.¿Qué había en la Biblia de Garavito?"Había decidido no abrir esta Biblia por respeto a Dios en el que creo; pero me hicieron una reflexión sobre cuántas conclusiones se pueden sacar de lo que se encuentre en el interior de este libro que perteneció tantos años a uno de los peores criminales de Colombia y el mundo", explicó en su programa.En medio del podcast Kevin abre la Biblia que es de color negro y, en una ojeada que dura cerca de una hora se observan varias anotaciones que hacía 'La Bestia', las cuales no todas tenían que ver con versículos; pues en unos papeles se encontraron recordatorios sobre medicinas que debía tomar, mientras que en otros había recordatorios sobre personas.Sobre las personas, se detalla que Garavito guardaba notas dentro de su Biblia con nombres de personas con las que había hablado o contra las que tenía alguna opinión negativa. Dicho recordatorio eran presuntamente una serie de pistas que él se dejaba escritas para recordarlas en el momento de escribir en su diario. ("Escribir sobre X persona x comentario").En varios apartes de la Biblia se encuentran párrafos, frases o palabras resaltadas, entre las que llama la atención que resalta con otros colores o con más fuerza los escritos que mencionan niños o tentación a la carne: "De la boca de niños, y de los que mamo...".El "regalo" de Luis Alfredo Garavito al periodista incluye una dedicatoria en la que incluye un curioso mensaje que, luego de desearle éxito le recalca que "el mundo no ofrece sino un camino de muerte".La Biblia de GaravitoPuedes ver: Prueba clave en el Caso Colmenares estaría en Medicina Legal
Luis Alfredo Garavito Cubillos es uno de los hombres que más ha marcado negativamente la historia de Colombia por ser quien apagó la vida de por lo menos 200 menores de edad en varias regiones del país.Su actuar inició cuando a penas era un adolescente quien, tras unos años de abusar menores de edad, aumentó su crueldad en los años 90', apagándoles la vida a sus víctimas bajo dolorosas prácticas, hasta cuando fue capturado definitivamente en 1999 y terminó confesando la mayoría de sus actos.Por los detalles de sus actos contra menores de edad, Garavito fue llamado con apodos como 'La bestia' y 'El monstruo', unos sobrenombres que nunca lograron acercarse a la frialdad de sus acciones.Y pese a lo repudiable de sus confesiones, 'La bestia' logró captar la atención no solo de la población que vivía aterrorizada de pensar que algún día recobrara su libertad, sino también de expertos forenses, psiquiatras, periodistas y hasta escritores que buscaban entrar en la mente de este personaje para conocer más allá de lo que dicen los registros de su expediente judicial.La última entrevista de Luis Alfredo GaravitoDesde la cárcel, y a lo largo de su condena, Luis Alfredo solo dio dos entrevistas en las que no reveló mayores detalles distintos a lo plasmado en el expediente ya que adaptó sus diálogos y versiones a su antojo; pues en medio de su maldad, contaba con una astucia para acomodar relatos y lograr manipular a través de la religión.Sin embargo, pocos años antes de su fallecimiento Garavito le abrió nuevamente las puertas a la prensa y permitió que un periodista se acercara mucho más a su vida, a tal punto que terminó por hacerle confesiones y regalos para ser recordado.Se trata del periodista Kevin Pinzón, quien a través de cartas logró persuadir al condenado para que le permitiera entrevistarlo y tener una versión más fresca sobre su vida y sus hechos. Esta terminó siendo la última entrevista que dio 'El monstruo' que falleció en 2023.Los acercamientos entre Garavito y el periodista, quien se encontraba trabajando para el programa Testigo Directo, se extendieron por cerca de cuatro años en los que el señalado homicida entabló una cercanía con el profesional a quien terminó revelarle mayores episodios desconocidos de su actuar.En un podcast llamado Historias Paranormales, dirigido por el antropólogo e historiador Esteban Cruz, Kevin Pinzón dedico un capítulo para hablar sobre su experiencia entrevistando a Luis Alfredo, de quien conoció que era manipulador, agresivo y, además, capaz de engañar con un comportamiento pulcro y ajustado a las normas.Garavito adaptó letra de una novela a su vida personalSon incontables los detalles que revela el periodista en el podcast sobre su experiencia en la cárcel de máxima seguridad La Tramacúa, en Valledupar, a la que tuvo que asistir varias veces y por interminables horas para lograr horas de grabación con el mayor asesino en serie de niños en Colombia.Y en medio de los recuerdos que tiene, Kevin Pinzón revela que tuvo que ganarse tanto la confianza de 'El monstruo' que tenía que estar disponible para él cada vez que lo requiriera por teléfono; por eso, sin importar la hora, el día o lo que estuviera haciendo "tenía que contestarle sí o sí, siempre, porque si no, él se molestaba y cambiaba su actitud", algo que afectaba la fluidez en el momento de grabarlo.En medio del las vivencias, el periodista, quien sacó dos libros sobre estas entrevistas, recuerda que en una de las llamadas Garavito hasta le cantó una canción, algo que causó asombro en sus familiares que estaban escuchando la llamada.Exactamente en el minuto 10:20:00 del podcast Kevin recuerda que un domingo tuvo que contestarle una llamada a Luis Alfredo mientras estaba en un almuerzo familiar, por lo que lo puso en altavoz para poder seguir comiendo: "Me dijo: 'Qué hubo Kevin'. Le dije: 'Qué más viejo (así le decía a Garavito), y el tipo comienza a cantar... Nunca se me va a olvidar la cara de mis papás, quedaron impresionados porque le cambió la letra de la canción de Betty La Fea y la acopló a la vida de él".Al seguir su relato, insiste en que "Garavito tiene una composición de esa canción acoplada a la vida de él", e inmediatamente revela algunos detalles de la letra que le cantó: "Dicen que soy bestia, que me gustan los menores...".El podcast revela muchos más detalles inéditos sobre cómo el periodista logró ganarse la confianza del hombre que atemorizó a todo un país y que finalmente falleció el 12 de octubre de 2023 a causa de un cáncer.Garavito adaptó letra de una canción a su vidaPuedes ver: Prueba clave en el Caso Colmenares estaría en Medicina Legal
Luis Alfredo Garavito, ha sido sometido a la incineración en Valledupar después de 70 días desde su fallecimiento a causa de complicaciones derivadas de la leucemia y un cáncer ocular. El cadáver, desprovisto de dolientes que quisieran reclamarlo, enfrentó un destino desolado y solitario en la ceremonia de cremación, que la alcaldía se vio obligada a patrocinar, dado que nadie asumió la responsabilidad de sus exequias. El lúgubre cierre de esta oscura y dolorosa etapa en la historia del país se consumó el jueves 21 de diciembre de 2023.Durante 70 días, el cuerpo de Garavito yació en las instalaciones de Medicina Legal, generando un debate y reflexión en la sociedad sobre cómo abordar la memoria y el legado de quien perpetró crímenes tan atroces. La noticia de su muerte, recibida con alivio y perturbación, desencadenó trámites legales y disputas familiares respecto al destino de sus restos mortales. Pese a la petición de sepultura, la presión familiar, canalizada a través de una tutela, determinó que el cuerpo fuera entregado para su cremación.El nombre de Garavito perdurará como sinónimo de actos deshumanizados perpetrados contra los más vulnerables. Sus crímenes han dejado cicatrices imborrables en la sociedad, y su muerte, aunque ponga fin a su presencia física, no mitigará el dolor en las familias de las víctimas ni en la nación en general.La prolongada estancia de su cadáver en Medicina Legal plantea interrogantes éticos sobre el manejo post mortem de individuos que encarnan el mal extremo en la sociedad. La controversia y reflexión sobre qué hacer con los restos de quien causó tanto sufrimiento han marcado estos últimos días.El criminal falleció el 12 de octubre en la Clínica Santo Tomás de la Capital del Cesar debido a complicaciones de salud por leucemia y cáncer ocular, perdiendo la visión en su ojo izquierdo. Por razones económicas, su familia optó por la incineración en lugar de la sepultura en un cementerio de la capital del Cesar.Su cadáver permaneció 70 días en el Instituto Nacional de Medicina Legal debido a trámites legales. La familia, sintiéndose injustamente obstaculizada, interpuso una acción de tutela que recientemente fue fallada a su favor. El proceso crematorio, financiado por el alcalde de Valledupar, Mello Castro, se llevó a cabo en el Parque Cementerio Jardines del Recuerdo, con la presencia de la defensa de Garavito, el Defensor del Pueblo, y la delegada de asuntos penitenciarios, liderando el proceso de entrega y cremación.Te puede interesar: Gran final de Retóxicos puso a prueba la supervivencia de los competidores
Luis Alfredo Garavito, infamemente conocido como 'La Bestia', un nombre que evoca horror y desolación por los atroces crímenes que cometió, está siendo cremado en Valledupar tras 70 días de su fallecimiento a causa de complicaciones de salud relacionadas con la leucemia y un cáncer ocular. Este trágico capítulo de la historia colombiana se cierra con la incineración de quien perpetró actos inenarrables contra más de 200 niños en tres países.El desenlace final de Garavito, quien murió el pasado 12 de octubre, se ejecuta en contra de su último deseo explícito: ser enterrado. A pesar de su petición escrita, la realidad dictada por circunstancias legales y familiares ha llevado su cuerpo a la cremación en la capital del Cesar, Valledupar, en una situación excepcional que involucró una tutela para su realización.El proceso de incineración se llevó a cabo este jueves 21 de diciembre de 2023, marcando el cierre de un capítulo oscuro y doloroso en la historia del país. Durante 70 días, el cuerpo de Garavito se mantuvo en las instalaciones de Medicina Legal, un tiempo que ha generado debate y reflexión en la sociedad sobre cómo enfrentar la memoria y el legado de alguien responsable de crímenes tan atroces.La noticia de la muerte de Garavito, aunque recibida con una mezcla de alivio y perturbación, desencadenó una serie de trámites legales y disputas familiares respecto al destino final de sus restos mortales. La petición de su sepultura no pudo ser cumplida debido a las circunstancias legales y la presión de los familiares, quienes a través de una tutela lograron que su cuerpo fuera entregado para su cremación.El nombre de Garavito permanecerá en la memoria colectiva como sinónimo de los actos más atroces y deshumanizados perpetrados contra los más vulnerables. Sus crímenes dejaron una cicatriz imborrable en la sociedad, y su muerte, aunque ponga fin a su presencia física, no apaciguará las heridas dejadas en las familias de las víctimas ni en el país en general.El hecho de que su cuerpo haya permanecido por un período prolongado en Medicina Legal despierta cuestionamientos sobre el manejo post mortem de individuos que encarnan el mal extremo en la sociedad. El dilema ético de qué hacer con los restos de alguien que causó tanto sufrimiento ha sido objeto de controversia y reflexión en estos últimos días.La cremación de Garavito no solo marca el fin de su existencia física, sino también plantea preguntas profundas sobre cómo enfrentar y procesar el legado de aquellos cuyas acciones han causado un daño inconmensurable. Este evento pone fin a la vida de un individuo, pero no diluye la memoria de sus atrocidades, dejando a la sociedad con la difícil tarea de abordar la memoria de un pasado oscuro que no puede ser olvidado.Te puede interesar: Gran final de Retóxicos puso a prueba la supervivencia de los competidores
La ciudad de Valledupar se enfrenta a una inquietante situación que ha generado preocupaciones tanto a nivel de salud pública como en la esfera legal. El cadáver de Luis Alfredo Garavito Cubillos, conocido por ser el responsable de numerosos crímenes contra niños en Colombia y Ecuador, permanece sin recibir un destino final, lo que ha desatado un debate sobre las condiciones de conservación y las implicaciones sanitarias que esto podría tener.Pues aunque hace unos días llegaron, desde Génova a Medicina Legal de Valledupar, unos familiares del asesino, el cuerpo no pudo ser entregado por no estar al día algunos trámites que permitan verificar la consanguinidad; por eso los familiares decidieron marcharse de de nuevo sin los restos del detestado infanticida.Garavito, apodado "la Bestia" o el 'Monstruo de Génova', falleció el 12 de octubre en la Clínica Santo Tomás de Valledupar a causa de dos tipos de cáncer, leucemia y cáncer en el ojo izquierdo. Su muerte desató una serie de cuestionamientos legales y familiares que aún no se han resuelto por completo.Pocos días después de su fallecimiento, un joven afirmó ser sobrino de 'La Bestia' y presentó documentos que se encuentran actualmente en análisis para determinar la autenticidad de su parentesco y, por ende, si tiene derecho a reclamar el cuerpo del difunto.Sin embargo, a medida que el tiempo avanza, la entrega del cadáver se mantiene pendiente, y la familia que se había presentado en Medicina Legal, junto a un individuo que asegura ser abogado de Garavito, decidieron abandonar Valledupar sin llevarse los restos mortales del notorio criminal.La situación ha generado preocupaciones en torno a la salud pública, ya que el cadáver de Garavito permanece en una nevera intermedia del Instituto Nacional de Medicina Legal de Valledupar. Expertos advierten que las temperaturas en estas neveras no se mantienen constantes, lo que podría resultar en un problema de salud pública en la capital del Cesar.En respuesta a esta situación, Silvio Cuello, el personero de Valledupar, envió a un delegado de la Personería para verificar el estado del cuerpo y las condiciones de su conservación.Al mismo tiempo, las autoridades pertinentes continúan analizando la documentación para determinar si los restos mortales pueden ser finalmente entregados a la persona que afirma ser su sobrino.Paralelamente, personas cercanas a la familia de Garavito han expresado su preocupación por la falta de avances en la entrega del cuerpo y las pertenencias del 'Monstruo', que aún se encuentran en la Cárcel de Alta y Mediana Seguridad de Valledupar. Se han difundido versiones que sugieren que existe interés en estudiar el cerebro de Garavito, lo que ha despertado temores sobre posibles intenciones de comercializar dicho órgano.La situación sigue siendo un tema de gran interés y preocupación tanto para las autoridades como para la opinión pública en Colombia, mientras se buscan soluciones legales y sanitarias adecuadas para esta situación única y delicada que daría fin a la existencia de uno de los hombres más repudiados en el país.También puedes ver: ¿Te comerías una lombriz viva? 😨ReTóxicos capítulo 12
El fallecimiento de Luis Alfredo Garavito Cubillos el pasado 12 de octubre en la Clínica Santo Tomás de Valledupar ha suscitado una profunda controversia en la ciudad. Garavito, el violador y asesino de casi 200 niños en Colombia, Ecuador y Venezuela, es un nombre que evoca horror y repulsión en la memoria colectiva de la región. Sin embargo, la preocupación ahora se centra en el destino de su cuerpo, específicamente en su cerebro.Pues en medio del proceso de entrega del cuerpo, surgió un rumor que ha causado inquietud en la familia del fallecido y la comunidad en general. Se ha especulado que el cerebro de Luis Alfredo Garavito podría ser objeto de interés para posibles investigaciones científicas. Y es que se dice que serían varias entidades y profesionales interesados en estudiar más a profundidad el cerebro de 'La bestia' que acabó con casi 200 niños y que además tenía planeada una masacre de adultos para dar fin a su vida.En medio del rumor surgen temores sobre qué pasará con el cerebro del fallecido asesino y si es verdad que podría ser vendido por parte de la familia para ser objeto de estudio.Esta especulación se suma a la desconfianza existente en el entorno de la familia debido a la demora en el proceso de entrega del cuerpo y la falta de información sobre las pertenencias de Garavito; pues la familia teme que, desde antes de su entrega, sea extraído el cerebro del violador de niños y entregado a terceros.Desde su fallecimiento, el cadáver de Garavito ha estado resguardado en una nevera intermedia de Medicina Legal de Valledupar. Aunque este proceso es común en casos de esta naturaleza, han surgido inquietudes sobre la constancia de la temperatura fría en la que se mantiene el cuerpo, lo que ha generado preocupación tanto en la comunidad como en las autoridades locales.Silvio Cuello, personero de Valledupar, señaló que esta situación ha causado molestias entre los funcionarios de Medicina Legal, quienes han expresado dudas sobre la estabilidad de la temperatura fría en la que se guarda el cuerpo. La Personería tomó cartas en el asunto y envió un delegado para verificar la situación y garantizar que se cumplan adecuadamente los protocolos de manejo de cuerpos en estas condiciones sensibles.Inicialmente, la familia tenía programada la cremación del cuerpo del asesino para el 18 de octubre en el parque cementerio Jardines del Recuerdo de Valledupar. Sin embargo, el sobrino de Garavito, quien había llegado a la ciudad para llevar a cabo este procedimiento, se marchó sin las cenizas del condenado. Esta situación llevó a que la familia otorgara un poder al secretario de Gobierno municipal, Felipe Murgas, para recibir el cuerpo de Luis Alfredo Garavito Cubillos y verificar su identidad antes de la cremación.En medio de esta controversia, la familia de Luis Alfredo Garavito busca respuestas y una resolución adecuada para el manejo de su cuerpo, en un contexto en el que el debate sobre el destino de su cerebro y la incertidumbre en torno a su registro civil se han convertido en el centro de atención de Valledupar. La ciudad y el país observan con atención cómo se resuelve este complicado episodio que mezcla el horror del pasado con la incertidumbre del presente.Gabriel Alfonso Beltrán, abogado de Garavito, mencionó que el sobrino del condenado llegó a Valledupar con los registros civiles de Luis Alfredo y de su hermana Esther Garavito Cubillos. Aunque el documento presentado no estaba completamente claro, se podía evidenciar que se trataba del registro civil de Garavito.También puedes ver: ¿Te comerías una lombriz viva? 😨ReTóxicos capítulo 12
El 12 de octubre de 2023 marcó el triste fin de la vida de Luis Alfredo Garavito, conocido de manera macabra como "La Bestia" o el "Monstruo de Génova". Garavito, durante los años 1992 y 1999, asestó un golpe demoledor a la humanidad al cometer una serie de crímenes atroces que incluyeron torturas, abusos sexuales y asesinatos de cerca de 200 menores de edad en Colombia, Ecuador y Venezuela.El camino hacia la perversidad de Garavito comenzó temprano. Su primer delito se registró cuando tenía tan solo 15 años, cuando intentó abusar de un niño menor que él, quien por fortuna logró escapar de sus garras. Sin embargo, el primer asesinato que cometió tuvo lugar en 1992, y a partir de ese momento, sus acciones siniestras se volvieron casi una rutina, cobrando la vida de innumerables menores hasta que fue capturado en 1999. Durante su tiempo en prisión, Garavito no solo confesó múltiples crímenes, sino que también proporcionó detalles y coordenadas que ayudaron a los investigadores a encontrar los restos de algunas de sus víctimas.Mientras estaba en prisión, Garavito reveló un oscuro sueño que había estado gestando antes de ser arrestado, un plan macabro que habría marcado el horrendo final de su carrera criminal como asesino de niños. Sin embargo, este siniestro proyecto nunca se concretó debido a su captura en 1999, lo que evitó que llevara a cabo su escalofriante plan, que incluía la toma de más vidas, aunque en esta ocasión no serían menores de edad.La revelación de este escalofriante plan se hizo pública en una entrevista realizada por Mauricio Aranguren, autor del libro "El fracaso de la Fiscalía: 192 niños asesinados", en la que Garavito confesó sus retorcidos planes. En sus palabras, el asesino confesó que se estaba cansando de matar a menores de edad, ya que los consideraba víctimas fáciles de convencer. Esta insensible percepción lo llevó a cambiar su enfoque.De acuerdo con su testimonio, Garavito había planeado cambiar sus víctimas a adultos, pero lo más aterrador de su confesión fue su deseo de cometer esta masacre ante los medios de comunicación. Buscaba que su acto final fuese una macabra exhibición, con la esperanza de aumentar su notoriedad como el mayor asesino de niños en Colombia y uno de los más infames en el mundo. Su plan era que, después de cometer estos asesinatos públicos, la justicia y la sociedad lo persiguieran al punto que, eventualmente, terminara asesinado.Este relato macabro y egocéntrico revela la mente retorcida de Garavito, quien buscaba la fama y la notoriedad incluso en sus últimos momentos. Su detención en 1999 no solo impidió que continuara con sus crímenes atroces, sino que también puso fin a su siniestro sueño de aterrorizar a la sociedad y la prensa de una manera aún más espeluznante. El nombre de Luis Alfredo Garavito perdurará en la infamia, recordándonos la importancia de la justicia y la protección de los más vulnerables en nuestra sociedad.También puedes ver: ReTóxicos capítulo 11: Enfrentar sus miedos nunca fue tan difícil
Durante el transcurso de este miércoles 18 de octubre se llevará a cabo la cremación de los restos de Luis Alfredo Garavito, infamemente conocido como 'La Bestia', debido a su larga historia como violador y asesino serial de niños.A pesar de las inquietudes iniciales sobre el lugar de sepultura de Garavito, se ha determinado que sus cenizas no descansarán en una bóveda del cementerio de Valledupar, como el propio asesino lo había deseado, sino que serán trasladadas a Génova, Quindío, su pueblo natal.Esta determinación se conoce luego de que saliera a la luz dos peticiones especiales que hizo 'La bestia' antes de morir, en las que dejó clara que su última voluntad era que sus restos mortales fueran enterrados en Valledupar.Sin embargo, el último deseo del asesino de niños no será tenido en cuenta y sus restos serán cremados y luego entregados a familiares que finalmente lo trasladarán a su ciudad natal.El proceso de cremación fue posible gracias a una solicitud realizada por la Defensoría del Pueblo después de que un sobrino de Garavito se presentara en las instalaciones de Medicina Legal. No obstante, este protocolo se ha visto afectado por un obstáculo debido a la falta del registro civil de Garavito, lo que inicialmente complicó el proceso, ya que el sobrino debía demostrar el vínculo de sangre.La Alcaldía de Valledupar asumirá los gastos de este procedimiento, que se estiman en aproximadamente $2.700.000.La muerte de Luis Alfredo Garavito se produjo el 12 de octubre a causa de un cáncer ocular. 'La Bestia', 'El Monstruo de Génova', o como también era conocido, Garavito Cubillos, pasó a la infamia debido a su extenso historial criminal, que incluye más de 200 asesinatos de niños, niñas y adolescentes de entre 8 y 15 años. Sus crímenes no se limitaron a Colombia, ya que también se le vinculó a homicidios en Venezuela y Ecuador.A pesar de la gravedad de sus crímenes, la condena inicial de Garavito fue de 1.853 años y nueve días de prisión por delitos que incluían actos sexuales violentos, homicidio, acceso carnal violento, secuestro simple e incendio culposo. No obstante, en 1999, su condena fue reducida a la pena máxima de 40 años de prisión.Como resultado, Luis Alfredo Garavito Cubillos cumplió solo 24 años de su condena. Su fallecimiento se produjo el 12 de octubre alrededor de la 1:30 de la tarde, a raíz de un paro cardiorrespiratorio, consecuencia de su larga lucha contra el cáncer ocular y la leucemia que padecía desde hace varios años. La noticia de su muerte marca el fin de un capítulo oscuro y perturbador en la historia de la justicia colombiana.Te puede interesar: Retóxicos capítulo 10: El reality completo
La tierra volvió a moverse en Colombia la noche de este jueves 21 de noviembre. A las 7:03 p.m., un temblor de magnitud 4,0 fue registrado por el Servicio Geológico Colombiano, con epicentro en el municipio de Tona, en el departamento de Santander. Este movimiento telúrico, aunque de intensidad moderada, fue percibido en varios municipios cercanos, generando una lluvia de comentarios entre los habitantes de la región.Epicentro y alcance del movimiento telúricoEl sismo tuvo su origen en Tona, y se sintió en municipios cercanos: a 12 kilómetros de Santa Bárbara y 18 kilómetros de Floridablanca, otros municipios santandereanos que también sintieron el remezón. La profundidad del temblor, estimada en 182 kilómetros, ayudó a que su impacto se distribuyera ampliamente, pero sin causar mayores daños en la superficie.A pesar de su relativa lejanía, el movimiento no pasó desapercibido para los residentes de Bucaramanga y municipios aledaños, quienes rápidamente recurrieron a las redes sociales para compartir su experiencia. Algunos reportaron haber sentido vibraciones fuertes en edificios altos, mientras que otros mencionaron que el sismo los tomó por sorpresa mientras realizaban actividades cotidianas.Reacciones y balance tras el sismoEl evento no generó mayores afectaciones. Las autoridades locales y organismos de emergencia confirmaron que no hubo pérdidas humanas ni daños significativos en la infraestructura de las zonas afectadas. De igual forma, no se emitieron alertas especiales, aunque se mantiene el monitoreo preventivo de la actividad sísmica en la región.Vale la pena mencionar que el departamento de Santander, ubicado sobre el Nido Sísmico de Bucaramanga, es una de las zonas con mayor actividad tectónica en el país. Este fenómeno natural, aunque inquietante, forma parte del día a día de sus habitantes, quienes están acostumbrados a recibir movimientos telúricos de diferentes magnitudes con relativa frecuencia.
El nombre de Jhon Viáfara es recordado por muchos en Colombia y el mundo del fútbol por sus destacadas participaciones, especialmente cuando fue parte del histórico título de la Copa Libertadores con el Once Caldas en 2004. Sin embargo, su legado deportivo se ha visto opacado por un oscuro capítulo de su vida que lo llevó a ser condenado a 11 años de prisión en Estados Unidos. La pregunta es clara: ¿por qué un exfutbolista exitoso terminó involucrado en actividades ilícitas? La respuesta está en una red de narcotráfico que lo arrastró, y un viejo amigo que lo introdujo en este mundo.'El Papá': El hombre que introdujo a Viáfara al narcotráficoEl vínculo de Viáfara con el narcotráfico no es algo fortuito ni reciente. Según las investigaciones de las autoridades colombianas y estadounidenses, esta relación comenzó por medio de Jaider Díaz Carabalí, conocido como 'El Papá', un hombre que fue amigo de la niñez del futbolista. Ambos crecieron en Robles, un pequeño corregimiento de Jamundí, Valle del Cauca, en donde compartieron su juventud. Sin embargo, mientras Viáfara seguía su camino hacia la fama en el fútbol, Díaz cayó en las redes del narcotráfico y comenzó a operar con carteles mexicanos y centroamericanos, usando su negocio de maquinaria pesada como fachada.La ambición de Viáfara que lo llevó al narcotráficoDíaz, quien se había convertido en un capo del narcotráfico, buscó a su antiguo amigo para que lo ayudara a coordinar envíos de cocaína hacia Estados Unidos. Viáfara, por su parte, no estaba atravesando un buen momento financiero tras su retiro del fútbol y aceptó la oferta de 'El papá', quien le prometió una vida de lujo.Fue entonces cuando el exfutbolista se convirtió en un operador de la red de narcotráfico, coordinando reuniones con narcotraficantes y facilitando el transporte de la droga.La caída y la extradiciónEntre 2016 y 2019, la organización de 'El Papá' fue desmantelada en varios operativos, con incautaciones de cientos de kilos de cocaína. Durante las investigaciones, Viáfara fue identificado como 'El Futbolista', un alias que le fue asignado debido a su reconocimiento público. A pesar de su intento de defenderse alegando que había sido víctima de un montaje, las pruebas en su contra fueron contundentes, y en 2020 fue extraditado a Estados Unidos.Allí, fue condenado por conspiración para importar y distribuir cocaína, recibiendo una sentencia de 11 años de prisión. Mientras su vida se desmoronaba, su antiguo amigo, 'El Papá', eludió la justicia por un tiempo, refugiándose en las montañas del Cauca. No obstante, fue capturado y ahora enfrenta una extradición a Estados Unidos, donde podría encontrarse con Viáfara en algún penal.Puedes ver | Netflix anunció que realizará una docuserie sobre James Rodríguez
Jhon Eduis Viáfara Mina, quien alguna vez brilló en los estadios del mundo y fue clave en la histórica victoria del Once Caldas en la Copa Libertadores de 2004, hoy enfrenta una realidad muy distinta. Desde una prisión en Atlanta, Estados Unidos, cumple una condena de 135 meses tras declararse culpable en noviembre de 2020 de conspiración para importar más de cinco kilogramos de cocaína a territorio estadounidense.Viáfara, conocido por su talento en equipos como América de Cali, Portsmouth de Inglaterra y Real Sociedad en España, dejó una huella imborrable en el fútbol colombiano. Su gol en la final de la Libertadores contra Boca Juniors fue el primero en abrir el camino hacia un título histórico. Sin embargo, la gloria futbolística quedó empañada al ser extraditado en 2019 por cargos relacionados con narcotráfico y concierto para delinquir.Las investigaciones revelaron que, entre 2017 y 2018, Viáfara formó parte de una organización criminal vinculada al envío de cocaína hacia Estados Unidos. Según las autoridades, esta red, que mantenía nexos con el cartel de Sinaloa, utilizaba embarcaciones rápidas y aeronaves para transportar la droga. Durante las operaciones, se incautaron 2.5 toneladas de cocaína, valoradas en cerca de 28 millones de dólares, y se capturaron 20 personas.Un fenómeno recurrenteEl caso de Viáfara no es aislado. La reciente aprobación de la extradición del exfutbolista Rolan de la Cruz por la Corte Suprema de Justicia de Colombia refuerza una triste realidad: algunos ídolos del deporte han terminado involucrados en actividades ilícitas. De la Cruz, quien militó en equipos como Independiente Santa Fe y Deportivo Cali, enfrenta cargos similares en Estados Unidos por ser parte de una red de narcotráfico desde 2016.El traslado de De la Cruz a territorio estadounidense solo espera la firma del presidente Gustavo Petro. Este caso revive las historias de jugadores como Viáfara, quienes pasaron de ser íconos deportivos a protagonistas de crónicas judiciales.Reflexiones desde la cárcelDesde su celda, Viáfara ha compartido reflexiones sobre su caída en entrevistas con medios como La Patria. Reconoce los errores que lo llevaron a perder su libertad y el impacto de sus decisiones en su vida y la de sus seres queridos. A pesar de su situación, su nombre permanece ligado al recuerdo de aquel glorioso Once Caldas que desafió las probabilidades y conquistó América.La historia de Jhon Viáfara es un recordatorio de cómo las malas decisiones pueden transformar radicalmente una vida de éxito, dejando preguntas sobre el entorno y las circunstancias que empujan a figuras públicas hacia caminos oscuros.Mira también: Nelson Velásquez condenado a pagar cárcel
Jhon Viáfara, exfutbolista colombiano, es un claro ejemplo de cómo la fama, la fortuna y las decisiones equivocadas pueden llevar a una persona al abismo. Considerado un ídolo del fútbol, su carrera en equipos como América de Cali, Portsmouth, Southampton y la Real Sociedad estaba llena de logros, pero su nombre hoy está ligado a un escándalo de narcotráfico que cambió su vida para siempre.De ídolo a condena en Estados UnidosDurante su carrera, Viáfara fue un jugador destacado y muy querido, no solo en Colombia, sino en todo el mundo. Participó con la Selección Colombia en dos ediciones de la Copa América, en 2004 y 2007, y dejó una huella importante en cada club donde jugó. Su talento en el campo y su personalidad carismática le aseguraron un lugar en el corazón de los aficionados.Sin embargo, detrás de la imagen pública de éxito, Viáfara se vio involucrado en un mundo oscuro de narcotráfico. A lo largo de los años, se supo que el exjugador había formado parte del Clan del Golfo, una de las organizaciones criminales más poderosas y peligrosas de Colombia, dedicada al tráfico de drogas. Entre 2008 y 2016, Viáfara fue señalado como uno de los miembros activos de este grupo, involucrándose en el tráfico de cocaína hacia Estados Unidos.¿Cuántos años de prisión le esperan a Viáfara?La captura de Viáfara en 2019 en Cali fue solo el comienzo de su caída. Tras ser arrestado, las autoridades colombianas decidieron extraditarlo a Estados Unidos, donde enfrentó cargos por narcotráfico. En 2020, un tribunal estadounidense lo condenó a 11 años de prisión, una sentencia que refleja las graves consecuencias de involucrarse en el crimen organizado. De esta manera, lo que una vez fue una vida de fama y éxitos en el fútbol se convirtió en una prisión en la que paga por sus decisiones.Hoy en día, Viáfara se encuentra cumpliendo su condena en una prisión de Estados Unidos, lejos de los estadios y de la fama que una vez disfrutó. Puedes ver | Netflix anunció que realizará una docuserie sobre James Rodríguez
El exarquero Carlos Bejarano sorprendió en redes sociales al publicar una fotografía de una videollamada con el exfutbolista Jhon Viáfara, recordado por su paso por la Selección Colombia y su título de Copa Libertadores con el Once Caldas en 2004. Esta imagen es la primera aparición pública de Viáfara desde su encarcelamiento en Estados Unidos, donde cumple una condena de 12 años por delitos relacionados con narcotráfico.En la fotografía, Viáfara, con uniforme blanco del sistema penitenciario estadounidense, una gorra gris y una leve sonrisa, aparece conversando con Bejarano. El exarquero acompañó la publicación con el mensaje: “Cuando se es bueno, Dios actúa y hasta el tiempo pasa rápido”. La instantánea, difundida a través de Instagram, rápidamente generó comentarios en apoyo y reflexiones sobre el difícil momento que enfrenta el exjugador.¿Qué pasó con Jhon Viáfara?El caso de Jhon Viáfara ha sido uno de los más sonados en el mundo del deporte colombiano. Luego de retirarse del fútbol, donde brilló en clubes nacionales e internacionales y representó a la Selección Colombia en las Copas América de 2004 y 2007, su vida dio un giro inesperado. En 2019, fue capturado en Colombia por colaborar con un grupo criminal para transportar sustancias ilícitas hacia Estados Unidos. Un año después, fue extraditado y sentenciado.Su condena generó un fuerte impacto, dado que Viáfara no solo era considerado una figura destacada del fútbol colombiano, sino también un modelo a seguir para muchos jóvenes deportistas. Durante su carrera, jugó en equipos ingleses como el Southampton y en España, dejando una huella en el ámbito deportivo.Jhon Viáfara habló de su caso y dijo ser víctimaEn una entrevista de 2022 con el diario La Patria, Viáfara expresó su inconformidad sobre el manejo de su caso. Afirmó haber sido víctima de un montaje y sentirse utilizado como un "trofeo" en la lucha contra el narcotráfico. “Me mostraron como un delincuente, con riquezas que no tenía. Me relacionaron con personas que nunca conocí”, aseguró con tristeza.Estas palabras reflejan el dolor de un hombre que, tras vivir momentos de gloria, enfrentó un drástico cambio en su vida. Aunque ha sido crítico con las autoridades, también ha reconocido que cuenta con el apoyo de quienes lo conocen profundamente y saben quién es realmente.La publicación de Bejarano ha despertado múltiples interpretaciones. Algunos lo ven como un gesto de amistad y fe en la redención de Viáfara, mientras que otros cuestionan la falta de detalles sobre la situación actual del exfutbolista.