El fin del mundo podría llegar esta Navidad, según profecía maya

El 21 de diciembre de 2012, millones de personas en todo el mundo se reunieron para esperar el fin del mundo. La profecía maya, que predice el final de un ciclo de 5.125 años, había llevado a muchos a creer que el mundo se acabaría en esa fecha.

Sin embargo, el 21 de diciembre de 2012 llegó y se fue sin que ocurriera nada especial . Los mayas, sin embargo, no predijeron el fin del mundo como un evento catastrófico, sino como un cambio de era.

Ahora, algunos expertos creen que la profecía maya podría cumplirse en 2023. Según estos expertos, el final del ciclo de 5.125 años podría coincidir con una serie de eventos catastróficos que podrían llevar al fin del mundo.

Entre los eventos que podrían ocurrir en 2023 se encuentran:

• Un impacto de asteroide
• Una guerra nuclear
• Un cambio climático severo
• Una pandemia global

Por supuesto, es imposible saber con certeza si la profecía maya se cumplirá en 2023. Sin embargo, el hecho de que se haya vuelto a hablar de ella es un recordatorio de que el fin del mundo es una posibilidad real.

La mayoría de los expertos no cree que la profecía maya se cumplirá en 2023. Sin embargo, hay algunos que creen que es posible que ocurran algunos eventos catastróficos en ese año.

Por ejemplo, el astrónomo David Morrison, del Centro de Estudios de Objetos Cercanos a la Tierra de la NASA, cree que existe una pequeña posibilidad de que un asteroide impacte la Tierra en 2023. Sin embargo, dijo que la probabilidad de que ese impacto sea lo suficientemente grande como para causar el fin del mundo es muy baja.

Otros expertos creen que es más probable que el fin del mundo sea causado por el cambio climático o una guerra nuclear. Sin embargo, también dijeron que es difícil predecir cuándo podría ocurrir alguno de estos eventos.

En última instancia, cada individuo debe decidir si cree que la profecía maya se cumplirá en 2023. Sin embargo, hay algunas cosas que podemos hacer para prepararnos para cualquier posible evento catastrófico.

Por ejemplo, podemos crear un plan de emergencia en caso de un desastre natural o una guerra. También podemos reducir nuestra huella de carbono para ayudar a combatir el cambio climático.

Además, podemos tratar de vivir nuestras vidas de la manera más plena posible, en caso de que el fin del mundo sea inminente.

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