Una madre vivió una verdadera
Martiza Elizabeth, residente de Illinois,
Ante esta situación, la mujer tomó cartas en el asunto y se levantó en plena madrugada e intentó enfrentar a la presunta alma en pena que asechaba el sueño de toda su familia con linterna en mano y con los latidos de su corazón a mil.
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Sin embargo, pese a su esfuerzo y valentía de ir a la habitación de su bebé, simplemente se encontró a su pequeño profundo y nada más a su alrededor, lo que la obligó a regresar a la cama pero con una angustia indescriptible.
A la mañana siguiente, Martiza aprovechó la luz del día con la intención de revisar nuevamente y comprobar si se le había escapado un detalle, y efectivamente, notó que la "presencia maligna" simplemente se trataba de una pegatina de una
cara de un bebé en el colchón.
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La mujer compartió en su perfil de
