En un bautismo que prometía ser una ceremonia tradicional, un niño llamado Ryan se robó el show con una respuesta inesperada que lo catapultó a la fama en redes sociales.
Mientras el sacerdote realizaba el rito habitual, preguntó al pequeño si deseaba confirmar su fe cristiana. En lugar de una respuesta esperada, Ryan sorprendió a todos con un firme "No", seguido de la declaración que lo convirtió en una sensación viral: "Quiero ser Messi".
Publicidad
El momento, grabado en video, rápidamente se volvió viral, generando una ola de comentarios y reacciones en las plataformas digitales. El sacerdote, visiblemente sorprendido pero comprensivo, intentó mantener la compostura y, con una sonrisa, aceptó la inesperada respuesta del niño. A pesar del momento jocoso, la ceremonia continuó sin mayores contratiempos.
La respuesta de Ryan, lejos de ser una negativa a la fe cristiana, mostró una devoción hacia su ídolo futbolístico, Lionel Messi. Esta espontaneidad, mezcla de inocencia y admiración, resonó en los asistentes y en los espectadores en línea , quienes no pudieron evitar reírse ante la sorpresa.
Publicidad
El sacerdote, tratando de reconducir la conversación hacia el contexto del bautismo, preguntó a Ryan si quería ser amigo de Jesús. Esta vez, el niño respondió afirmativamente, permitiendo que la ceremonia siguiera adelante.
El video del pequeño Ryan ha recibido una gran cantidad de interacciones, con muchos usuarios celebrando la frescura y honestidad del niño. Mientras algunos destacan la figura de Messi como una influencia positiva, otros simplemente disfrutan de la originalidad del momento.
🔴 | Niño se hizo viral en su bautizo tras ser preguntado por el cura si quería ser Cristiano: "No, quiero ser Messi". pic.twitter.com/pXfAvy2aN2
— Alerta Mundial (@AlertaMundoNews) August 28, 2024
Este bautismo, que en un principio parecía una ocasión común, se transformó en un evento memorable gracias a la respuesta de Ryan. Su comentario no solo ha capturado la atención en redes sociales, sino que también ha sido un testimonio de la capacidad de los niños para mezclar la inocencia con el fervor por sus ídolos. Sin duda, este momento será recordado y compartido por mucho tiempo, demostrando que incluso en eventos serios, un toque de espontaneidad puede dejar una impresión duradera.
Publicidad
Delincuentes robaron a los compradores de una panadería
Publicidad