El noticiero de CNN concluyó con un giro sorprendente cuando la querida presentadora Sara Sidner compartió en vivo con los televidentes que ha sido diagnosticada con cáncer de mama y está actualmente en tratamiento.
Antes de revelar su propia batalla, Sidner instó a los espectadores a hacer una lista de ocho mujeres cercanas, ya sean familiares o amigas, destacando que una de ellas, según las estadísticas, podría enfrentarse a la enfermedad. En un momento impactante, reveló que ella misma es esa "una" de cada "ocho".
A pesar de su buena salud previa, la periodista expresó su asombro al encontrarse lidiando con un cáncer de mama en fase tres. Sidner, en su segundo mes de quimioterapia, se prepara para someterse a radioterapias y a una doble mastectomía. Aunque reconoce que la fase tres ya no es necesariamente una "sentencia de muerte", destacó una estadística preocupante que descubrió durante sus investigaciones: las mujeres negras tienen un 41 % más de probabilidades de morir por cáncer de mama en comparación con las mujeres blancas o de tez morena.
En un tono reflexivo, la presentadora hizo un llamado a todas las mujeres, independientemente de su raza, instándolas a realizarse mamografías anuales y a detectar la enfermedad en sus etapas iniciales. A pesar de la adversidad, Sidner agradeció ser quien tiene cáncer de mama, destacando que ahora aprecia más cada día y se enfoca en la felicidad de vivir, compartiendo momentos con sus compañeros de trabajo y dejando atrás preocupaciones triviales.
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La valiente revelación de Sara Sidner resuena como un llamado a la conciencia y la prevención, destacando la importancia de la detección temprana y la solidaridad en la lucha contra el cáncer de mama.
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